Horóscopo: los cuatro signos más dramáticos

Entre los signos del zodiaco hay algunos muy dramáticos, mucho más que otros. Cuáles son los signos que viven dentro de una novela de la siesta
miércoles 27 de julio de 2022
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Hay signos que son muy dramáticos, que parecen salidos de una telenovela de la siesta. Todo en sus vidas es un drama y nada es justo en el mundo con ellos.

Algunos de ellos no logran sostener una discusión sin llorar o gritar. En muchas ocasiones, a las personas bajo estos signos del zodiaco no les hace falta tener un conflicto, solament sentirse perjudicados por el resto del mundo y esto les suele pasar muy a menudo.

Los signos del zodiaco más dramáticos

Aries: los arianos y las arianas son muy melodramáticos por naturaleza. Todo lo que les pasa es un drama y su vida es una novela turca en la que el mundo se complota para que no sean felices y no consigan lo que quieren.

Escorpio: los escorpianos son de demostrar muy poco cuando algo los afecta pero cuándo lo hacen hay que agarrarse. Son tan sangre caliente que muchas veces se terminan ahogando en un vaso de agua cuando la solución suele ser muy simple y rápida. Su novela en la vida es más parecida a una miniserie, corta pero intensa.

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Géminis: los geminianos y geminianas son prácticamente unos actores especialistas en el drama. Cuando algo les pasa, suelen recurrir a los gritos y a las lágrimas para apoyar sus argumentos o su falta de esos. Protagonistas de una novela venezolana.

Cáncer: las personas bajo el signo de cáncer no suelen aguantar la presión y cuando la tienen, se suelen paralizar con los más mínimos detalles. Igual que el geminiano, encuentra sus armas en los gritos, las lágrimas y su poder de sobre actuación. Su novela es una mezcla de una producción mexicana con turca.

Cómo identificar una persona dramática

Todos estamos en constante interacción con otras personas cada día, y allí es donde está lo divertido de la vida: todos somos diferentes y cada persona se caracteriza de una forma muy particular. Seguramente en tu vida has tenido, o tienes, a alguien que es muy dramático, que todo se lo toma en serio y para quien la tarea más pequeña se puede convertir en una lucha épica. Por eso hoy hablaremos de 4 cosas que delatan a una persona dramática:

– Todo se lo toma muy en serio: Si tienes un amigo dramático sabrás que cualquier cosa que digas, así sea en chiste, se la tomará muy en serio. Eso a veces puede llegar a ser muy molesto y dar pie a discusiones que para ti son absurdas, pero que para él tal vez sean muy importantes. Pero no todo es negativo, pues una de las cosas buenas que tiene tener un amigo dramático es que nunca subestimará lo que le cuentes y siempre se tomará muy en serio lo que le pidas.

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– Es muy susceptible: Las personas dramáticas se pueden sentir ofendidas por cualquier cosa. Si quieres decirle algo importante pero que puede sonar mal, o incluso ofensivo, entonces lo mejor es que le des vuelta a la idea para hacerla más digerible. Una persona susceptible suele tomarse las críticas a título personal y cualquier cosa que digas puede ser interpretada como un ataque hacia a ella. Así que si odias pedir disculpas y sueles decir las cosas sin filtro, entonces lo mejor es que no tengas gente dramática a tu alrededor.

– Siempre se siente la víctima: Si tienes un amigo dramático y haces algo sin contarle primero, lo más probable es que se lo tome mal. Este tipo de personas siempre se sienten víctimas del mundo y ese gesto lo tomarán como algo deliberado. Igual ocurrirá cuando haces algo que a él no le gusta: creerá que lo hiciste justamente para molestarlo. La gente dramática suele culpar a los demás de sus propios problemas y siempre encuentran problemas y obstáculos hasta para las tareas más sencillas.

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Exagera los problemas: Esto es típico de una persona dramática. Algo que comenzó como una sencilla discusión se puede convertir en una “Guerra Mundial”, prácticamente de la nada. Este tipo de personas exagerará las circunstancias, te hará sentir culpable y, para defender su punto de vista, traerá a la conversación temas que nada tienen que ver con el problema inicial. Igual ocurre cuando algo malo les pasa y te lo cuentan, pues probablemente sea algo que tú solucionarías con una simple llamada, pero para ellos puede ser un asunto sin posibilidad de solución.