La Unión Europea (UE) y el Mercosur buscarán acelerar la ratificación de su tratado de libre comercio como respuesta a los aranceles impuestos por Estados Unidos. El acuerdo, firmado en diciembre pasado, permitiría a ambos bloques reducir su dependencia del mercado estadounidense y fortalecer sus economías frente a las medidas proteccionistas de Donald Trump. 

Francia flexibiliza su postura, pero con condiciones

Francia, uno de los mayores críticos del acuerdo, ha comenzado a mostrar mayor apertura ante la necesidad de proteger su economía. Sin embargo, exige garantías para su sector agrícola, temeroso de la competencia con productos del Mercosur como carne y cereales. El gobierno de Emmanuel Macron propuso una "cláusula de emergencia" que permita frenar importaciones si afectan gravemente a los productores locales. Esta medida busca equilibrar el tratado sin bloquear su avance.

La Unión Europea busca agilizar la entrada en vigencia del acuerdo comercial con el Mercosur tras los aranceles de EE. UU.

España y Alemania impulsan el acuerdo

Países como España y Alemania lideran los esfuerzos para concretar el tratado. El ministro español de Economía, Carlos Cuerpo, destacó la importancia de "fortalecer la relación con socios estratégicos" en un contexto global incierto. Alemania, por su parte, ve en el Mercosur una oportunidad para su industria y presiona para superar las resistencias internas en la UE. Ambos países confían en que el acuerdo se ratifique en los próximos meses.

El proceso de ratificación sigue caminos distintos en cada bloque. Mientras que en el Mercosur solo requiere la aprobación de los parlamentos nacionales, en la UE el trámite es más complejo. Bruselas estudia separar la parte comercial del acuerdo para acelerar su entrada en vigencia, ya que esta puede aprobarse por mayoría sin necesidad del visto bueno unánime de los 27 países. Esta estrategia permitiría activar beneficios económicos antes de fin de año.

La Unión Europea busca agilizar la entrada en vigencia del acuerdo comercial con el Mercosur tras los aranceles de EE. UU.

Próximos pasos y beneficios a largo plazo

La próxima cumbre del Mercosur, prevista para fin de año en Brasil, podría ser el escenario para un avance significativo. Si la UE logra aprobar la parte comercial este año, el tratado entraría en vigor de manera provisional mientras se negocian los aspectos políticos. No obstante, la ratificación final en todos los parlamentos europeos podría extenderse hasta 2026, dependiendo de las tensiones internas en el bloque.

El acuerdo no solo reduciría el impacto de los aranceles de Trump, sino que crearía la mayor zona de libre comercio del mundo, con más de 700 millones de consumidores. Para el Mercosur, significa mayor acceso a mercados de alta tecnología; para la UE, una puerta a recursos agrícolas y materias primas. Aunque persisten desafíos, ambos bloques coinciden en que el tratado es clave para enfrentar un escenario económico cada vez más proteccionista.