Brote histórico de dengue: ¿qué pasa con el mosquito ante la baja de temperatura?

De acuerdo al Boletín Epidemiológico emitido por el Gobierno, hubo una leve caída en la cantidad de contagios semanales
lunes 15 de abril de 2024
Es fundamental sostener las medidas de cuidado como el uso de repelente
Es fundamental sostener las medidas de cuidado como el uso de repelente

El Ministerio de Salud de la Nación informó recientemente los datos sobre la incidencia del dengue en Argentina. Según el Boletín Epidemiológico, desde la semana 31 de 2023 -fines de julio y comienzos de agosto- hasta la semana 14 de 2024 -principios de abril-, se han notificado un total de 269.678 casos, con un predominio del 90% de casos autóctonos, un 7% en investigación y un 3% importados. De estos, 252.566 casos corresponden exclusivamente al año 2024.

La incidencia acumulada hasta la fecha para esta temporada se sitúa en 573 casos por cada cien mil habitantes. Además, se clasificó un total de 643 casos como dengue grave, representando un porcentaje del 0,2%, y se registraron 197 fallecimientos relacionados con esta enfermedad viral transmitida por el mosquito Aedes aegypti, con una letalidad actual del 0,07%.

De acuerdo a lo precisado en el documento, “en el análisis de la curva epidémica de dengue a nivel país se registra un descenso en el número de casos semanales en la penúltima semana analizada respecto de la anterior (para la semana 13 se registraron hasta el momento 29.840 casos, casi un 32% inferior a lo registrado para la semana 12). Si bien hay que tomar con prudencia los casos de las últimas semanas, porque pueden modificarse de acuerdo a la sucesiva integración de información por parte de los notificadores, este fenómeno no ocurría desde la semana 50 de 2023 -mediados de diciembre- desde la cual se había verificado una tendencia ininterrumpida al aumento de casos hasta la semana 12 de 2024″.

Al analizar esta situación, los expertos han considerado diversos factores que podrían influir en el aparente descenso del número de casos semanales. Uno de los puntos es la incidencia del clima -precisamente de las temperaturas más bajas registradas en los últimos días- en la reducción de la población de mosquitos transmisores, lo que podría contribuir a la disminución de los casos de dengue.

En Tucumán se han registrado temperaturas menores a los 22°, y aunque se espera que en las próximos días el termometro se eleve. “Las bajas temperaturas para el mosquito sí aletargan lo que es la actividad, pero para que comience a bajar la población se necesita una temperatura menor a 10 grados, sostenida por lo menos entre 10 y 15 días”, explicó al respecto la encargada del Departamento de Prevención de Riesgos Ambientales de la Dirección de Salud Ambiental, Carolina Chiappini.

“Esto va a generar que el mosquito adulto, volador, muera, pero lo que son pupas, huevos y larvas no sucumben con las bajas temperaturas, entran en un estado de latencia. Es más, el huevo puede en ese estado persistir hasta un año y cuando se dan las condiciones óptimas de temperatura y humedad comienzan a emerger nuevamente”, refirió la profesional.

“Hay que tener en cuenta que en este periodo hay muchos pacientes con dengue, por lo tanto, por más que baje lo que es la población de mosquitos, seguimos en riesgo de contagio”, agregó Chiappini.

Y en ese sentido, aseveró: “al estar más frío en el exterior el mosquito va a tender a ingresar al domicilio, a las casas, donde la temperatura es mayor, por lo que debemos tener aún más cuidado, usar espirales, tabletas, líquidos, para matar el mosquito. También controlar los recipientes que puedan servir de criadero, como las plantas acuáticas, algunos dispensers que tengamos en interiores o en lugares de trabajo que muchas veces no se limpian habitualmente”.

Para estar protegidos en este período la especialista recomendó una serie de tareas para realizar en el hogar y no quedar expuestos. “Es importante revisar resumideros o canaletas con alguna caída de agua que tengamos permanente en la casa, aprovechando que el mosquito volador no va a estar en el exterior”, indicó.

“También hay que limpiar, eliminando todo lo que sean criaderos para que cuando se den las condiciones óptimas no tengamos emergencia nuevamente”, advirtió Chiappini.