"Con el barbijo y la vacunación podremos pasar el invierno sin sobresaltos"
El Ministro de Salud Pública, Luis Medina Ruiz, en diálogo con Los Primeros TV resaltó la importancia que sigue teniendo el uso de barbijos y la vacunación para evitar el contagio de Covid-19, por eso recomendó a la comunidad a seguir utilizando la protección en nariz y boca, en especial en los lugares cerrados como oficinas y el colectivo; además de completar el esquema de vacunación.
"La disminución de contagios y el hecho de no tener personas internadas con respirador mecánico son el resultado de la vacunación", expresó el titular de la cartera sanitaria, al destacar que en las últimas semanas se mantiene un número bajo de contagios. Sin embargo, reconoció que la pandemia todavía no terminó y que el virus sigue circulando en Tucumán, con menos incidencia pero con algunos pequeños picos que elevan los casos en forma aisladas a más de 10 pacientes por día.
Medina Ruiz estimó que hay alrededor de un 30% de la población que no completó el esquema de vacunación, entre ellos están quienes aún no se dieron la tercera dosis, es decir, el primer refuerzo. Indicó que hay un 60% de personas mayores de 50 años que por suerte tienen las tres dosis, pero el objetivo del ministerios es llegar a la mayor cantidad de tucumanos.
Para ello, aseguró que Salud cuenta con un stock de 500 mil dosis para colocar todas las dosis necesarias, desde la primera hasta la cuarta. Precisó que salvo los vacunatorios del Club Caja Popular y Ojo de Agua, en todos los nodos se está vacunando con normalidad.
Los siniestros viales
El funcionario lamentó el incremento de accidentes viales o siniestros viales, como prefiere llamarlo, en las guardias de los hospitales. Por ese motivo adelantó que por pedido del gobernador interino, Osvaldo Jaldo, están próximos a lanzar un programa de Prevención de Siniestros Viales.
Medina Ruiz manifestó que los siniestros viales son otra pandemia en Tucumán, con graves hechos que a diario son atendidos en el Hospital Padilla, "la guardia representa un verdadero termómetro de lo que se vive en las calles, donde los motociclistas en actitud temeraria se manejan sin usar el casco y en forma desaprensiva".
