Covid-19 en la Argentina: los contagios subieron
El Ministerio de Salud informó este domingo que en los últimos siete días se detectaron 2082 nuevos contagios de coronavirus, lo que representó una suba del 11,3% respecto de la semana anterior. Los casos subieron tras once semanas ininterrumpidas en baja.
En tanto, los fallecimientos a causa de la enfermedad también se redujeron. Este domingo se informaron 9 muertes por Covid-19, tres menos que en los siete días previos.
Según el reporte semanal, ya son 9.717.546 los casos confirmados y 129.979 las víctimas fatales en la Argentina desde el inicio de la pandemia.
Si bien con la modificación del reporte, que pasó de diario a semanal, ya no se informa la cantidad de testeos realizados, los cambios en los criterios indican que se mantiene bajo el número de hisopados, pese a la suba de casos de hace algunas semanas.
Cuántas camas de terapia intensiva están ocupadas con pacientes con coronavirus
Los pacientes que permanecen internados con COVID-19 en las distintas unidades de terapia intensiva (UTI) del país son 245, lo que representó una baja a de 5,4% respecto de los registrados una semana antes. Es la cifra más baja desde el 25 de mayo de 2020.
Así, la ocupación de camas de terapia intensiva se ubicó esta semana en el 41%.
Cómo avanza la vacunación
De acuerdo con los datos oficiales, a este domingo, se aplicaron 109.747.597 dosis de vacunas contra el coronavirus, distribuidas de la siguiente manera:
- Vacunados con esquema iniciado: 41.019.104 personas.
- Vacunados con esquema completo: 37.861.384 personas.
- Vacunados con dosis adicional: 3.155.449 personas.
- Vacunados con primera dosis de refuerzo: 21.683.697 personas.
- Vacunados con segunda dosis de refuerzo: 6.055.074 personas.
De qué forma el COVID-19 prolongado influye en el rendimiento físico
Al hablar de la enfermedad que produce el SARS-CoV-2 y sus efectos colaterales se han escuchado aspectos tales como niebla mental, fatiga y dolor de cabeza. A estos se los identifica como síntomas del COVID-19 prolongado. Sin embargo, aunque se hable poco de algunos, lo cierto es que se conocen. Estas son secuelas cardiopulmonares persistentes y la intolerancia al ejercicio. Esta situación puede ocurrir entre el 3% y el 30% de las personas después de transitar la enfermedad, incluidas las no hospitalizadas y las vacunadas, y puede persistir durante al menos 12 meses.
Falta de aire
Las conclusiones a las que arribaron los investigadores sugieren que debido a que este subgrupo padeció un COVID-19 prolongado, se puede haber reducido la extracción de oxígeno en los músculos, produciendo patrones de respiración irregulares y una menor capacidad para aumentar la frecuencia cardíaca durante el ejercicio para igualar el gasto cardíaco. Además, como consecuencia de la inactividad que se da a la hora de padecer una enfermedad física, se encontró evidencia de un desacondicionamiento en el cuerpo de los evaluados.