Ternura total: dos pumas disfrutando de la nieve en Mendoza

Por medio de una foto tomada a través de un vidrio espejado se las ve sonriendo y disfrutando de la nieve. Están aisladas en un centro de rehabilitación.
viernes 15 de julio de 2022
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Greta y Thelma son dos pumas adultas juveniles que permanecen desde que nacieron en el Centro de Conservación y Manejo de Fauna de la ONG S.O.S. Acción Salvaje, ubicado en San Carlos, en las afueras de las zonas que concentran la mayor población de ese departamento del Valle de Uco. El lugar cuenta con amplias extensiones para la recuperación de pumas, cóndores y otras especies silvestres de Mendoza.

En la foto que pudo tomarse se puede observar en primer plano y con un protagonismo central y casi exclusivo de la ve a Greta -de 3 años- panza arriba, con sus patas estiradas, su boca abierta sacando la lengua y casi sonriendo mientras muestra sus afilados dientes. Detrás, con un perfil más bajo y como si quisiera evitar la cámara está Thelma, de casi 5 años. Esta última permanece mirando fijo hacia un determinado punto -que no es el lente de la cámara-, sin inmutarse ni dejarse llevar por las ganas de jugar de su compañera.

“Esta mañana amaneció nevado y, cuando me acerqué al recinto donde están las pumitas (aisladas del contacto humano), encontré a las dos jugando en la nieve. Permanentemente se está filmando lo que ocurre en el lugar, pero a esta foto la saqué a través de un vidrio espejado que hay en la puerta del recinto”, contó el presidente de la ONG “S.O.S. Acción Salvaje”, Eduardo Furlán.

Las dos felinas, que están en el lugar prácticamente desde que nacieron y quienes fueron criadas con biberón luego de que sus madres fueran víctimas y presas de cazadores furtivos -algo que está prohibido- aprovecharon el blanco amanecer en el departamento del Valle de Uco para dejarse llevar por su instinto juguetón.

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OBJETIVO: VOLVER A SU HÁBITAT

Lamentablemente, por las condiciones en que avanzó la recuperación de Thelma y su adaptación al cautiverio, ella no está apta para regresar a su hábitat natural. Pero un inédito programa que está llevando adelante la ONG local junto a la Dirección de Recursos Naturales y Renovables de Mendoza apunta a que no haya más “Thelmas” y que aquellos (y aquellas) pumitas que quedan huérfanos como consecuencia de la caza furtiva puedan reincorporarse a su hábitat una vez más maduros.

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“Es un trabajo importante e inédito en Argentina y hasta a nivel mundial el que se está haciendo. No hay muchas experiencias de crianza en aislamiento, liberación y seguimiento. Con esto se apuesta a la crianza del cachorro durante 2 años hasta que pueda ser liberado”, explica Furlán, quien aclara que todavía no han concretado ninguna liberación de ejemplar recuperado siendo cachorro y criado en cautiverio.

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“Siempre que se encuentra un puma, se lo lleva a una institución para que quede en cautiverio y allí queda. Actualmente, todos los centros de recuperación o ecoparques están desbordados de pumas. Por eso desde ‘S.O.S. Acción Salvaje’ surgió la idea de hacer este proyecto, y de darles una nueva posibilidad a los cachorros de ser liberados. Intentamos cambiar ese paradigma y darle una nueva oportunidad de reinserción. Por supuesto que tienen que cumplir ciertos requisitos para poder regresar a su hábitat, como por ejemplo aprender a cazar, y no acercarse al ser humano, sino más bien tener una actitud de huida cuando se percate de su presencia”, destaca el referente y activista.