Comenzarán a probar una vacuna universal contra el Covid
La farmacéutica alemana BioNTech y la gigante estadounidense Pfizer dijeron que en el segundo semestre de este año comenzarán las pruebas en humanos de vacunas de próxima generación, es decir, un tipo de vacuna universal contra el coronavirus.
El trabajo experimental de una vacuna universal para coronavirus, que va más allá del enfoque actual, incluye inyecciones que mejoran las células T, diseñadas para protegerse principalmente contra enfermedades graves si el virus se vuelve más peligroso, así como otras de pancoronavirus, que protegen contra la familia más amplia de virus y sus mutaciones.
En las diapositivas de presentación publicadas en el sitio web de BioNTech para su día del inversor, la empresa de biotecnología alemana dijo que su objetivo es “brindar una protección de variante duradera”.
Los dos socios, fabricantes de la vacuna contra el COVID-19 más utilizada en el mundo occidental, están discutiendo en la actualidad con los reguladores versiones mejoradas de su vacuna establecida para proteger mejor contra la variante Ómicron y sus sublinajes.
La persistente mutación del virus en nuevas variantes que evaden más fácilmente la protección de la vacuna, así como la disminución de la memoria inmunológica humana, han sumado urgencia a la búsqueda por parte de empresas, gobiernos y organismos de salud de herramientas de protección más confiables.
Como parte de un esfuerzo para impulsar aún más su negocio en enfermedades infecciosas, BioNTech dijo que está trabajando de forma independiente en antibióticos de precisión que matan a las superbacterias que se han vuelto resistentes a los fármacos disponibles actualmente.
BioNTech, que no dijo cuándo podrían comenzar las pruebas de la vacuna universal para coronavirus, se apoya en la tecnología de PhagoMed, que adquirió en octubre del año pasado.
El desarrollador de antibióticos, con sede en Viena, ha trabajado en enzimas producidas por virus que matan bacterias y que atraviesan la pared celular bacteriana.
Vacuna pediátrica anticovid para menores de 6 meses a 5 años
La Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA por sus siglas en inglés) y los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE.UU. (CDC) aprobaron la seguridad y eficacia de las vacunas pediátricas contra el covid para menores de cinco años. Sin embargo, advirtieron que es necesario estar atentos a posibles efectos secundarios.
Desde Moderna y Pfizer aclararon que los efectos adversos en los menores son, por lo general, “leves y de corta duración”, y revelaron que los más frecuentes son: hinchazón, dolor y enrojecimiento en la zona de aplicación de la vacuna; fatiga/cansancio; somnolencia; irritabilidad; pérdida del apetito; dolor de cabeza; dolor o malestar abdominal; y, en los casos más graves, ganglios linfáticos inflamados, diarrea leve y vómitos. No obstante, los expertos aclararon que los síntomas desaparecen rápidamente.
“En general, creo que los efectos secundarios más comunes de cualquiera de las vacunas anticovid siguen siendo los que vemos en prácticamente cualquier niño que recibe cualquier vacuna”, explicó en CNN Grant Paulsen, investigador principal del sitio para los ensayos clínicos de las vacunas contra el COVID-19 de Pfizer y Moderna para niños de 6 meses a 11 años en Cincinnati Children’s.
Por su parte, Ashish Jha, coordinador de respuesta anticovid de la Casa Blanca, señaló: “Los efectos secundarios que hemos visto en menores de 5 años son muy similares a los reportados en niños mayores o adultos. Alrededor de 24 horas después de la inoculación contra el SARS-CoV-2, algunos niños se sintieron cansados o no tuvieron el mismo apetito. Pero, afortunadamente, no ha habido ningún efecto secundario grave con estas vacunas. Es realmente reconfortante saber que para los niños pequeños estas vacunas son sumamente seguras”.
