Este domingo, la localidad de Trancas llevó a cabo la tradicional misa en honor a San Francisco Solano, reconocido como el santo protector de la comunidad. Este evento, que destaca en el calendario de festividades locales, reunió a un significativo número de fieles y peregrinos, quienes llegaron desde diversas partes de la región para participar de la ceremonia. 

La misa fue presidida por el arzobispo de Tucumán, monseñor Carlos Sánchez, quien se dirigió a los asistentes en la histórica jurisdicción de Villa Vieja, un lugar que posee un significado especial para los habitantes de Trancas. 

Durante la ceremonia, el arzobispo reflexionó sobre la importancia de la fe y la comunidad, invitando a los presentes a fortalecer sus lazos espirituales y a vivir en armonía, tal como lo predicaba San Francisco Solano. La celebración incluyó momentos de oración y cánticos, creando un ambiente de profunda espiritualidad. 

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