Día de la Independencia: cómo será la “Vigilia Patriótica” en Tucumán

La llegada de Javier Milei a Tucumán por primera vez desde que es presidente movilizará a toda la provincia
domingo 30 de junio de 2024
La Municipalidad de San Miguel de Tucumán organizará una Vigilia, en las puertas de la Casa Histórica
La Municipalidad de San Miguel de Tucumán organizará una Vigilia, en las puertas de la Casa Histórica

La Municipalidad de San Miguel de Tucumán organizará una Vigilia, el lunes 8 de julio, desde las 23, en las puertas de la Casa Histórica, con la participación de autoridades nacionales, provinciales y municipales, en conmemoración del 208° aniversario de la Independencia.

Durante el acto ingresará la imagen de la Virgen de La Merced, Generala del Ejército Argentino y Patrona de los tucumanos y tucumanas. Luego se llevará adelante el Cambio de Guardia.

Se tiene previsto que a las 23.45 se eleve la oración ecuménica a cargo de los referentes de las distintas religiones que conviven en la ciudad.  

A la medianoche, se realizará la entonación del Himno Nacional Argentino, para iniciar el 9 de julio.

Cuándo se firmará el Pacto de Mayo

La presencia del presidente, Javier Milei en Tucumán para firmar el Acta de Mayo sufrió un cambio de planes, tal como se había anticipado en Los Primeros.

"El 8 haremos la vigilia y después de las 12, luego de entonar las estrofas del Himno Nacional, se firmará el Pacto de Mayo y el presidente Milei ofrecerá unas palabras", expresó el vocero Manuel Adorni.

El martes 9, Milei presidiría el desfile militar en Buenos Aires. En tanto, durante la noche, además, podría jugar la Selección argentina por la Copa América, lo que complicaría los planes de difusión de la firma del Acta de Mayo. Por eso, se decidiría el cambio de fecha.

El Gobierno ya redactó una nueva versión del Pacto de Mayo que le hará llegar a los gobernadores una vez que se haya aprobado la Ley Bases (lo cual ocurrirá mañana, se espera, en la Cámara de Diputados). Cambió el título, que pasó a “Acta de Mayo”; eliminó el noveno punto, vinculado a temas electorales; desplazó del cuarto al quinto puesto el ítem sobre la reducción del gasto público; e incluyó un tópico que le habían pedido como condición para acompañar desde el interior, la educación, aunque omitió mencionar la etapa universitaria.

Además, Javier Milei incorporó un guiño a los mandatarios, con una breve aclaración en el renglón referido a la coparticipación. En el original, los firmantes se comprometían a una “rediscusión de la coparticipación federal de impuestos para terminar para siempre con el modelo extorsivo actual”. En la nueva, se le agregó: “...que padecen las provincias”.

En el final, sumaron un párrafo alusivo a la creación del Consejo de Mayo que anunció Milei en Córdoba hace un mes, esa entidad que, dicen, serviría para plasmar en proyectos de ley esos puntos. “Quienes suscriben el presente documento se comprometen, a su vez, a la constitución de un Consejo de Mayo para discutir el grande, augusto y sagrado objeto de la refundación de la Patria. Este organismo estará compuesto por un Presidente del Consejo de Mayo, por un representante del Poder Ejecutivo Nacional, un representante de la Cámara de Diputados, un representante del Senado, un representante de las provincias, un representante de las entidades gremiales y un representante del sector empresarial”.

Desde que se lanzó el pacto, el 1ro de marzo, la mayor parte de los 10 puntos habían tenido consenso. Pero se había generado ruido por dos reparos: la ausencia de la educación como temática de acuerdo nacional, y la alusión a “una reforma política estructural”. Ante esas objeciones, en un principio, el Gobierno había barajado la posibilidad de eliminar el tema político y restringir el pacto únicamente a los económicos. Pero luego tuvo lugar, en mayo, la enorme marcha universitaria contra el ajuste, uno de los hitos de rechazo a la gestión nacional. Por lo que, finalmente, accedió a incluirla. Sin embargo, se cuidó de no incorporar en el texto la educación superior. En varias ocasiones los libertarios habían dejado en claro que la postura oficial es que la fase universitaria no debe ser considerada esencial, y así quedó plasmado en el nuevo Pacto de Mayo.

Según consta en la versión corregida, el Presidente accedió incluir “una educación inicial, primaria y secundaria útil y moderna, con alfabetización plena y sin abandono escolar”. Y eliminó el noveno artículo, considerado una amenaza por los caciques provinciales, porque previeron que podría representar la puerta de entrada a una reforma electoral que los perjudique en elecciones futuras.

La alusión específica a la “alfabetización” coincide, no casualmente, con el plan de relanzamiento del Ministerio de Capital Humano que conduce Sandra Pettovello. Donde en pleno caos interno por irregularidades en contrataciones y compra de alimentos, tenían planeado lanzar un plan para garantizar la enseñanza de la habilidad de leer y escribir. Se comentaba que el programa iba a ser anunciado por la propia ministra. Sin embargo, el encargado de darlo a conocer finalmente sería el vocero presidencial, Manuel Adorni.