El Gobierno espera tener cerrado en los próximos días un programa nuevo con el Fondo Monetario Internacional que sea aprobado con un desembolso importante para reforzar las reservas del Banco Central en medio de una pérdida acumulada en las arcas internacionales y en pleno temporal en los mercados externos por la imposición de aranceles globales determinados por Donald Trump.

En medio de esa “tormenta perfecta” que incluye elementos internos, como la pérdida de divisas del BCRA -que llegó a enhebrar más de 10 jornadas consecutivas con saldo vendedor en el mercado oficial- y un deterioro en los activos argentinos que hizo que el índice de riesgo país subiera a más de 800 puntos básicos, el equipo económico aguarda una luz verde final por parte del directorio del organismo a mediados de este mes.

Para el mercado, el mínimo de desembolso que podrá recibir el BCRA en el primer giro que haga el FMI tras la aprobación del directorio será de USD 8.000 millones, aunque se especula con una suma mayor. El Gobierno apunta a un paquete más amplio para incrementar las reservas internacionales y que incluirá fondos adicionales desde otros organismos bilaterales y, posiblemente, una ampliación del préstamo Repo entre la autoridad monetaria y un grupo de entidades financieras privadas.

Se trata de un monto, ya de por sí, considerado excepcional como primer giro de divisas para este tipo de programas. El 60% de los últimos 311 acuerdos celebrados por el organismo contempló desembolsos iniciales de entre el 20 y el 30%, según la consultora 1816. El argumento oficial versa precisamente sobre la excepcionalidad del plan económico implementado, que se sentó a negociar con el FMI ya con el ajuste fiscal y monetario previos.

El Gobierno acelera las negociaciones con el FMI

Para el mercado, el mínimo de desembolso que podrá recibir el BCRA en el primer giro que haga el FMI tras la aprobación del board será de USD 8.000 millones, aunque se especula con una suma mayor

El Gobierno solicitó que el préstamo sea por USD 20.000 millones, que todos los dólares que ingresen serán de libre disponibilidad y que es un error “restar” de la cuenta el pago de intereses de los próximos cuatro años, ya que comenzarán a ser relevantes recién a partir de 2027.

Sin embargo, como esos pagos no se realizarán por adelantado, todos los dólares que lleguen antes de esas fechas son considerados “usables” para el Banco Central.

Miembros del equipo económico aseguraron en los últimos días, en público y en privado, que la expectativa es de un envío inicial superior al promedio de los acuerdos normales del FMI.