La OTAN convocó una reunión de emergencia

“El Secretario General presidirá mañana una reunión de emergencia de los embajadores de la OTAN para discutir este trágico incidente”, dijo Oana Lungescu.
miércoles 16 de noviembre de 2022
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El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, mantendrá una “reunión de emergencia” el miércoles con los embajadores ante la alianza militar transatlántica sobre una explosión acecida en Polonia, un país miembro de la organización, durante los bombardeos rusos de Ucrania.

“El secretario general presidirá mañana una reunión de emergencia de los embajadores de la OTAN para hablar de este trágico incidente”, dijo la portavoz de la OTAN, Oana Lungescu.

El gobierno de Polonia acusó formalmente a Rusia de lanzar un misil que causó la muerte de dos personas en la localidad de Przewodou, cercana a la frontera con Ucrania.

Polonia, un país de la OTAN, aumentó el martes su nivel de alerta militar tras la caída de un misil ruso en su territorio, en un vuelco de la guerra que amenaza con desencadenar una peligrosa escalada en Europa.

“Se acaba de decidir elevar el nivel de alerta de algunas unidades de combate (...) y de otro personal uniformado”, dijo el portavoz del gobierno, Piotr Müller, tras una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad Nacional.

Polonia alista sus tropas para el combate

El gobierno polaco indicó que “un proyectil de fabricación rusa” cayó en su territorio “matando a dos ciudadanos” polacos e informó que el embajador ruso en Varsovia fue convocado para dar “explicaciones detalladas” sobre lo ocurrido.

El presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, se dijo “conmocionado” y anunció que propondrá “una reunión de coordinación” de los líderes de la Unión Europea (UE) que participan en la cumbre del G20 de potencias industrializadas y emergentes que tiene lugar en Bali (Indonesia).

Polonia está protegida por el artículo 5 del tratado de la OTAN, que estipula que si un Estado miembro es blanco de un ataque armado, sus socios considerarán el acto como un ataque armado dirigido contra el conjunto de los países miembros y tomarán las medidas que juzguen necesarias para ayudar al país atacado.

Rusia calificó este martes de “provocaciones” las informaciones del incidente en Polonia. “Las declaraciones de los medios polacos y de responsables oficiales sobre una supuesta caída de misiles rusos cerca de la localidad de Przewodou son una provocación intencionada que buscan una escalada de la situación”, declaró el Ministerio ruso de Defensa en Telegram.

Las posibles respuestas de Polonia y la OTAN al ataque ruso


La incógnita está en saber si el gobierno de Varsovia va a invocar el artículo 5 de la organización militar occidental y pedir ayuda para responder a la agresión del Kremlin

La maquinaria de propaganda del Kremlin insiste en asegurar que está en guerra con la OTAN y no con Ucrania. Es una manera de enaltecer para sus acólitos la “gran cruzada” que supuestamente están llevando a cabo de recuperar un territorio que consideran parte de la “gran Madre Rusia”. Por un lado, denominan a la invasión como una simple “operación militar especial”; por el otro, dicen estar combatiendo al mal encarnado por la OTAN y sus 30 países miembros. Pero hasta este momento, las fuerzas rusas se habían cuidado de limitar sus fallidas operaciones a Ucrania, en un intento de no atacar directamente a la organización militar occidental. Incluso, los aliados encabezados por Estados Unidos se negaron hasta el momento a entregar armamento de largo alcance para que los ucranianos no puedan caer en la tentación de atacar a los rusos en su territorio y llevar la guerra a un nivel más profundo.

Sin embargo, el ataque de los misiles rusos a Polonia cambia todo. La OTAN se rige por un código básico de “todos para uno y uno para todos”. El artículo 5 del Tratado de Washington sostiene el concepto de defensa colectiva. Establece que un “ataque armado” contra un país miembro en Europa y Norteamérica se considerará un ataque contra toda la Alianza. Como consecuencia y en virtud del artículo 51 de la Carta de Naciones Unidas sobre la legítima defensa, los miembros de la OTAN pueden ejercer las medidas necesarias, incluso el uso de la fuerza, para restaurar la paz y la seguridad.

Lo que vimos hoy ocurrió cada vez que Rusia sufrió un revés en su intento de invadir Ucrania: respondió con un ataque indiscriminado de misiles, cohetes y drones kamikazes. Antes fueron los fracasos en la toma de Kyiv en los primeros días de la invasión de febrero y cuando tuvieron que replegarse se Kharkiv, la estratégica segunda ciudad ucraniana cercana a la frontera rusa. Esta vez es el humillante repliegue de la única ciudad importante que tenían en sus manos, Kharkov, durante el fin de semana, que abrió la posibilidad de que Ucrania termine por expulsar a los invasores de todo el sur del país. La respuesta fue siempre una lluvia de bombas sobre la población civil. Esta vez, más de cien misiles lanzados en forma indiscriminada que alcanzaron edificios de viviendas civiles en Kyiv y varias otras ciudades ucranianas. La gran diferencia es que, esta vez, dos de esos misiles se desviaron y terminaron alcanzando el territorio de otro país, Polonia, miembro de la OTAN.