La combinación de ingredientes refuerza la acción de las infusiones naturales. Entre estas opciones, el té a base de albahaca y jengibre figura entre las alternativas más elegidas.

Sus puntos a favor son contundentes. En cuanto a la albahaca, el sitio Gastrolab Web resume que se trata de una de las hierbas aromáticas más propicias para usar en tés y otras bebidas.

El alto contenido de flavonoides, poderosos antioxidantes, y saponósidos, sustancias con acción bactericida, favorece una buena digestión, ayudando a disminuir los gases, la pesadez abdominal y los calambres gastrointestinales. También alivia las nauseas y el sabor desagradable en la boca.

Por su parte, el jengibre contribuye a estimular el páncreas y permite aumentar la producción de enzimas favorecedoras para la digestión.

En conjunto, estas propiedades serán efectivas para contribuir a evitar la aparición de úlceras. 

La receta del té de albahaca y jengibre

Ingredientes

- 400 ml de agua

- 20 hojas de albahaca

- Jugo de 1/2 limón

- Ralladura de 2 rodajas de jengibre fresco

- 1 cucharadita de miel.

Preparación

Colocar las hojas de albahaca en el fuego con el agua, el jengibre y el limón. Una vez que alcance el hervor, cocinar por tres minutos. Retirar, dejar reposar por un par de minutos extras y colar. Si se desea, servir con una pizca de miel.

Para aprovechar sus efectos, lo ideal será tomarlo después de las comidas o a la noche. Esta última opción también será efectiva para conciliar el sueño. /Clarín

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