El pleno del Senado sancionó anoche la ley que suspende las PASO para el corriente año, por lo que el Gobierno consiguió cumplir con el objetivo primordial de las sesiones extraordinarias.

La iniciativa obtuvo la mayoría absoluta -37, obligatorio- de 43 votos entre oficialistas, varios dialoguistas -algunos, divididos- y un kirchnerismo que se fracturó en este tema como en Diputados, mientras que hubo 20 rechazos y seis abstenciones.

Con la votación de este proyecto, que llegaba con media sanción de la Cámara de Diputados, quedaron suspendidas las Primarias y los argentinos irán a las urnas solo una vez para elegir a senadores y diputados en todas las provincias. La elección nacional se desarrollará el 26 de octubre.

El oficialismo contó con el apoyo de algunos peronistas como Sandra Mendoza, Juan Manzur. Sin embargo, los que responden más directamente a la expresidenta Cristina Kirchner, como José Mayans, Juliana Di Tullio, Anabel Fernández Sagasti, María Inés Pilatti Vergara, Oscar Parrilli, Mariano Recalde y Alicia Kirchner, votaron en contra.

Por su parte, la tucumana Beatriz Avíla apoyó la iniciativa que dispone que se suspendan “durante el año 2025, las elecciones Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias contenidas en el título II de la ley 26.571, de Democratización de la Representación Política, la Transparencia y la Equidad Electoral”.

El bloque radical no votó de manera unificada y la iniciativa fue rechazada por los senadores Martín Lousteau, Maximiliano Abad, Flavio Fama y Pablo Blanco. En el caso de las abstenciones de Unión por la Patria, les correspondieron al pampeano Pablo Bensusán, la catamarqueña Lucía Corpacci, la rionegrina Silvina García Larraburu, el santafecino Marcelo Lewandowski, los riojanos María Florencia López y Jesús Fernández Rejal.

Desde el oficialismo, alegan que esta iniciativa permitirá ahorrar dinero en la realización de los comicios, al tiempo que la iniciativa refleja un intento de responder al descontento social con el sistema político.