La renuncia de Hernán Iramain como subsecretario de Capital Humano del municipio quedó marcada por la polémica, ya que el abogado acompañó su decisión con una fuerte nota dirigida a la intendenta Rossana Chahla para presentar su "renuncia indeclinable".

Los duros términos urtilizados por el abogado a la hora de exponer las razones de su dimisión, generaron sorpresa y preocupación, ya que revelan un estilo de conducción basado en actitudes personales que nadie se había atrevido a señalar hasta ahora en el poco tiempo que lleva Rossana Chahla al frente de la intendencia capitalina.

"Fundamenta mi decisión las diferencias ideológicas y de formas, las cuáles son absolutamente incompatibles con los principios y la moral que rigen mi actuar como persona y servidor público", expuso el ex subsecretario.

Aseguró además que "en una relación laboral, el respeto y la escucha activa son fundamentales", dejando en claro que, en este caso, "han resultado casi imposibles de mantener durante este período laboral".

"La incertidumbre permanente, la falta de respeto, el destrato, y la falta de confianza continua, sumada a sus drásticos e intempestivos cambios en la toma de decisiones del día a día, han afectado gravemente la estabilidad necesaria para ejercer el cargo de Subsecretario de Capital Humano", añadió.

Malezas y aguas servidas en el parque Quinto Centenario

En otro duro párrafo, Iramain aseveró haber "vivido situaciones en las que se me ha solicitado llevar adelante acciones que contradicen completamente mis convicciones, valores y principios morales y éticos".

"Desde mi perspectiva, estas solicitudes carecen de todo sustento y parecen estar guiadas más por motivos personales que por una planificación estratégica que respalde las mismas", reveló.

Y aunque agradeció "la oportunidad" de desempeñar el cargo durante dos meses y 14 días, el abogado consideró como un "deber" apartarse de las funciones asignadas. "Se ha cruzado el límite del respeto y las diferencias ideológicas", concluyó.

Semejante descripción generó preocupación en el entorno de la ex ministra de Salud de la provincia, ya que dibuja un perfil totalmente distinto al que la intendenta se encargó de mostrar en público, además de sentar un precedente que, en caso de marcar tendencia dentro del gabinete municipal, podría dañar seriamente la incipiente gestión.