Revelan una conversación de Alperovich con el tío de la denunciante: “¿Cuánto me va a costar esto?”
Durante la quinta jornada del juicio que se realiza contra el ex gobernador de Tucumán en los tribunales porteños, el hermano del padre de la mujer aportó datos sobre la reacción del imputado ante la denuncia.
Un llamado de parte de un número desconocido con una pregunta concreta: “¿Cuánto me va a costar esto?”. La voz era del ex gobernador José Alperovich, acusado de haber cometido nueve casos de abuso sexual contra su sobrina y ex asistente personal. Quien oía esa consulta era el tío de la denunciante, primo hermano del imputado, quien este lunes declaró, junto a otros cinco testigos, en la quinta jornada del juicio llevado a cabo en el Tribunal Oral Federal 29 de la Capital Federal.
“F.L. es sobrina mía, no nos veíamos mucho. Ella en el 2017 me habla un día para decirme que quería hablar conmigo y la cité a mi oficina. Ahí me comenta que José Alperovich le había pedido que trabajara con ella. Ella estaba trabajando en el Ministerio de Gobierno en ese momento -en el área de Archivos y como planta permanente-. Yo le contesté que me parecía que estaba muy bien, sobre todo por la relación de parientes que tenía -Alperovich- con mi hermano mayor, con Daniel, que era muy buena. Pero también le dije que el ritmo que tenía José era bastante intenso en cuanto a horarios que iba a tener que hacer. Yo trabajé con él un tiempo y lo había visto en años anteriores”, dijo el primero testigo de la jornada al iniciar su declaración.
“De ahí no la volví a ver -continuó-. Entró a trabajar con José. La veía muy poco, dejó de ir a las reuniones familiares. Ya en mayo de 2019, una semana antes de la elección -para la gobernación de Tucumán, donde Alperovich compitió contra Juan Manzur y perdió-, un día domingo, me llama: quería hablar conmigo. Nos encontramos en un bar y realmente la veo muy mal. Estaba llorando, temblaba. Me dijo que había dejado de trabajar con José, me dijo que José había abusado de ella, que la había tocado. Yo no entendía lo que me estaba diciendo. Me preocupó el estado en el que estaba. Me preocupaba más el estado en el que estaba más que lo que me estaba diciendo. Le dije ‘pará, vamos a un médico’. Yo no entendía lo que estaba pasando. Me decía cosas sueltas: que la había abusado, que la había tocado... Estaba muy mal, se fumó 20 cigarrillos en la hora y media que estuvimos en el bar”.
En otro momento de la declaración, el testigo comentó que después de su encuentro con su sobrina “no la vi más”. “Ese mismo año yo viajo al exterior, en septiembre u octubre. Me acuerdo de que estoy entrando un subte y me llama alguien con un número de teléfono desconocido. Atiendo y era José, que me dice: ‘Primo, ¿cómo andás? Vos sabés que F.L. me está por hacer una denuncia: decile que se deje de llenar la cabeza con David Mizrahí’. A lo cual yo le contesto que lo único que le podía decir era que (...) -la joven- está hecha mierda física y emocionalmente”.”¿Cuánto me va a costar todo esto?”, dijo el testigo acerca de lo que le expresó el acusado en esa comunicación. /Infobae