Intensa búsqueda de Lian en Córdoba: varias hipótesis y muchas dudas
El nene de tres años fue visto por última vez en la tarde del sábado. La búsqueda se centró en unos 1600 metros cuadrados, considerados como la “zona cero”. La investigación avanza con hermetismo
Un niño de 3 años, identificado como Lian Gael Flores Soraide, es intensamente buscado en la provincia de Córdoba luego de haber desaparecido de su casa durante la tarde del sábado en la localidad de Ballesteros Sud, cerca de la ciudad Bell Ville. Por el caso, las autoridades ya activaron el alerta Sofía.
Fuentes oficiales indicaron que el menor fue visto por última vez al rededor de las 15 del 22 de febrero. Sin embargo, sus padres, de nacionalidad boliviana, alertaron sobre su ausencia cerca de las 17, luego de la siesta, cuando comenzaron a buscarlo desesperadamente por su casa y predios aledaños.
Hasta el momento, la fiscalía a cargo de Isabel Reyna mandó a secuestrar una decena de celulares y tres camionetas que serán peritadas en los próximos días. La sospecha más fuerte es que Lian no está perdido, sino que se lo llevaron en la famosa “chata blanca” que marcó un vecino de Ballesteros Sud.
La investigación está bajo secreto de sumario por temor a que las pistas sean manipuladas. Por ejemplo, trascendió el lunes de manera extraoficial que la Policía de Córdoba encontró un short azul, el mismo color que vestía el nene antes de desaparecer. “Esta información no se pudo confirmar”, dijo una fuente del caso.
La fiscalía avanza con la declaración de los familiares de Lian, incluidos los hermanos, que fueron entrevistados por un grupo de psicólogos en Cámara Gesell, mientras los policías siguen rastrillando la zona rural del pueblo situado a menos de 40 kilómetros de Bell Ville.
Con perros adiestrados del K-9, drones, helicópteros, caballos y a pie, los policías de la provincia de Córdoba, junto con los de la Fuerza Federal, recorrieron unas 18 hectáreas que abarcan la pequeña localidad cordobesa. Todos los operativos que se hicieron, desde ese mismo sábado por la noche, dieron resultados negativos.
La cronología de la desaparición de Lian
El nene desaparecido es el anteúltimo de los seis hermanos Flores Soraide. Hasta el día de la desaparición, vivía con ellos y con sus padres en una casilla humilde en el interior de Ballesteros Sud, un pueblo con pocos accesos al que se llega solo por un camino rural, que conecta la población con la Ruta Nacional 9.
En un radio de apenas siete cuadras, habitan familias trabajadoras de la comunidad boliviana que se dedican a la fabricación manual de ladrillos de barro. El campo en el que se perdió Lian tiene pastizales y está rodeado de hornos con los que secan los materiales de la construcción, que luego son vendidos a toda la provincia de Córdoba y que llegan incluso hasta Santa Fe.
El mediodía del sábado, los padres de Lian decidieron irse a dormir la siesta, como lo suelen hacer casi todos los días después de una jornada laboral tan agobiante. Es que ese día la temperatura superó los 40 grados y lo único que podían hacer es refugiarse dentro de su casa para no sufrir tanto el calor.
En la comisaría de Bell Ville declararon que se levantaron a las 3 y media de la tarde. En ese momento, se dieron cuenta de que uno de sus nenes más chiquitos no estaba y empezaron a buscarlo por todo el predio. Como su patio no está delimitado, ni con rejas ni alambrado, salieron a recorrer la zona a pie y en sus vehículos.
Recién a las 19.40, Elías Flores, el papá de Lian, llamó a la Policía para informar que su hijo estaba desaparecido. Su versión ante la Justicia es que estuvo esas cuatro horas buscándolo y que radicó la denuncia cuando las esperanzas de encontrarlo por sus propios medios se agotaron.
“Nunca me había pasado esto. Hace cuatro años que vivo ahí, todos los días hago el mismo trabajo, el mismo horario, pero esta vez no sé qué pasó que de una desapareció”, aseguró el lunes en Telenoche (eldoceTV).
El hombre sospecha que alguien se lo llevó. “Había una chata que había entrado al lugar, que es más sospechoso. Lo conozco a mi hijo y no puede ir unos 200 o 100 metros más lejos con semejante calor. Alguien lo tiene”, aseguró.
El ministro de Seguridad de la provincia, Juan Pablo Quinteros, confirmó que desde el organismo iniciaron la búsqueda ese mismo día por la noche. La Policía Rural rastrilló la zona, pero la falta de luz no los ayudó. Por eso, volvieron al día siguiente con la División de Canes y los bomberos. También llevaron drones y un helicóptero. El domingo no encontraron nada.
Los operativos siguieron el lunes con más intensidad. Incluso, se sumó el Ejército a la búsqueda y se llegó a “peinar” unos 1600 metros a la redonda del lugar donde desapareció. El chiquito estaba descalzo, sin remera y vestido con apenas un short. La Justicia cree que sería difícil para un nene de tres años, que mide 90 centímetros, haber caminado tanto sin agua y sin comida. Pero no quieren descartar ninguna teoría.