Este miércoles finalizó el juicio por el crimen de Rocío Milagros Rojas, ocurrido el 1 de julio de 2021 en Lules. El banquillo de los acusados lo ocuparon María Carolina Graneros, la madrina de la víctima, y la pareja de la mujer, Edgardo Caro, quien hizo una confesión escalofriante en medio del proceso. Ambos fueron condenados a prisión perpetua.

Estamos conformes porque en lo sustancial de nuestra teoría del caso el tribunal ha compartido la perspectiva de niñez que habíamos solicitado y en definitiva el tribunal ha valorado un gran esfuerzo investigativo que hizo el Ministerio Fiscal, haciendo un trabajo muy importante con todas sus áreas científicas junto al fiscal Ignacio López Bustos. Fue una investigación compleja por todas las maniobras que hicieron los imputados para que la niña no sea habida. La única pena justa que podía ser aplicada para este caso es la prisión perpetua. Es difícil imaginar un caso más aberrante que este”, dijo el fiscal Pedro Gallo en rueda de prensa.

Rocío tenía 4 años cuando la asesinaron y su corta vida fue un calvario de principio a fin. Su muerte no fue menos aberrante y lo confirmó el propio Caro en la víspera del debate oral: violó a la nena hasta que se descompensó, la tiraron viva después en el pozo de una letrina y la prendieron fuego.