Este lunes por la noche, el barrio Acindar de Rosario fue escenario de un nuevo episodio de violencia que generó conmoción. Un colectivo de la línea 130 de Rosario Bus fue baleado en la intersección de las calles Winter y Cipolletti, a la altura de Avellaneda al 4500.

Según fuentes policiales, el ataque dejó como resultado al menos un impacto en el parabrisas delantero y otro en la parte derecha, a la altura de la rueda delantera. En principio, no se reportaron heridos entre los pasajeros ni el conductor del colectivo.

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Además de los disparos, los perpetradores dejaron una nota con una amenaza dirigida al gobernador Maximiliano Pullaro. Esta no es la primera vez que recibe amenazas en medio de la creciente ola de violencia en la ciudad.

En el lugar del incidente, se encontraron dos vainas servidas y, de manera preliminar, se sospecha que el autor del ataque podría haber utilizado una bicicleta para darse a la fuga.

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“Pullaro, basta. Pabellón 1, 2, 3, 4 de Piñero. Turco Azum, 6 sur Coronda”, decía el cartel que el gatillero dejó por debajo de la puerta del colectivo.

Tres horas después, a la 0.45, gatilleros arrojaron un trozo de cartón escrito con el texto: “TOE dejen de molestar. Atte: Los Tripi” y efectuaron seis disparos contra el minishop de una estación de servicio situada en Avellaneda y 27 de Febrero, en la zona oeste, donde únicamente se carga GNC.

El cartel es exactamente el mismo que fue dejado el sábado pasado en el atentado a tiros contra la sede de la Tropa de Operaciones Especiales, ubicada en Rouillón e Ituzaingó.