Hay estancamiento y prevén un freno en la suba de precios

Para los analistas, la caída en el consumo explicaría por qué la inflación se desaceleró antes de lo previsto, una tendencia que seguiría consolidándose; los riesgos del plan del Gobierno para las empresas y el empleo
domingo 24 de marzo de 2024

En la crisis que atraviesa la Argentina, los salarios no acompañaron a la inflación y se encuentran en los valores más bajos desde 2005, las ventas se estancan y ahora los comerciantes empiezan a debatir sobre qué hacer con la mercadería que tienen.

Este escenario no tomó por sorpresa al Gobierno, de hecho es el previsto por el propio Javier Milei, que en su primer discurso como presidente se encargó de advertirlo. “No hay alternativa al ajuste y no hay alternativa al shock. Naturalmente, eso impactará de modo negativo sobre el nivel de actividad, el empleo, los salarios reales, la cantidad de pobres e indigentes”, dijo el 10 de diciembre último. La apuesta del Poder Ejecutivo para los meses venideros es que la recesión permita desacelerar la inflación, una tendencia que empezó a observarse en enero.

Para Camilo Tirscornia, director de C&T Asesores Financieros, la economía está ante un importante cambio de paradigma. En diciembre, los precios pegaron un fuerte salto luego de años de controles, congelamientos y regulaciones. El tipo de cambio mayorista se devaluó el 13 de diciembre un 54% y alcanzó los $800, mientras que las cotizaciones financieras se acomodaban por encima de los $1000. También influyeron las expectativas.

“Las empresas ajustaron porque no sabían qué presión iban a tener o cuál sería la inflación hacia adelante. Eso terminó por generar un desacomodo total y hoy algunos precios quedaron desfasados para el nivel adquisitivo de la gente. Por eso se empezaron a observar más promociones, que intentan acomodarse a la realidad del mercado", señaló.

Los precios de los alimentos registraron la menor suba semanal desde octubre

El Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) también publicó algunos datos sobre la caída del consumo. Esta semana se conoció que las ventas en los supermercados se contrajeron en enero un 13,8% real frente al año anterior, mientras que en los autoservicios mayoristas la baja fue del 8,1% interanual. Las ventas en centros comerciales se desplomaron un 21,3% frente a enero del año anterior y el índice de producción industrial se hundió un 12,4%.

No obstante, los precios de los alimentos subieron 0,7% en la última semana y registraron la menor suba semanal desde la cuarta semana octubre de 2023 cuando habían anotado la misma variación. El valor de los productos de la canasta representó una desaceleración de 2,5 puntos porcentuales frente a los siete días previos. En lo que va de marzo, en tanto, los precios acumulan un alza del 7,7%.

Los datos se desprenden del último relevamiento de inflación en alimentos que elabora la consultora LCG. En las últimas cuatro semanas, los productos de la canasta básica tuvieron un incremento promedio del 11% y 9,1% medido de punta a punta.

Según los analistas, es probable que en marzo los alimentos suban por debajo del nivel promedio de inflación. Esa tendencia ya se dio en febrero, cuando el rubro aumentó 11,9% frente a un dato general de 13,2%.