Este domingo, durante el Jubileo de las Fuerzas Armadas en la Plaza de San Pedro, el Papa Francisco interrumpió la lectura de la homilía debido a dificultades respiratorias. El pontífice, de 88 años, pidió a un arzobispo que continuara la lectura y recibió aplausos de los más de 30.000 asistentes.

Desde el miércoles pasado, Francisco presenta síntomas de bronquitis, lo que ya le había obligado a trasladar sus audiencias del viernes y sábado a su residencia en la Casa Santa Marta. Además, el jueves recibió a grupos en la Domus Vaticana en lugar de en el Palacio Apostólico.

Este no es el primer episodio de salud que enfrenta el Papa. A principios de enero, un resfriado le impidió pronunciar el Ángelus, y días después sufrió una caída que lo dejó con una lesión en el brazo derecho, requiriendo el uso de un cabestrillo.

El Jubileo de las Fuerzas Armadas reunió a efectivos de seguridad, militares y policías de 100 países. La ceremonia se realizó a cielo abierto bajo un clima frío y lluvioso, lo que pudo haber agravado los síntomas respiratorios del pontífice.