El 5 de agosto de 2010 , un derrumbe en la mina San José quedó atrapados a 33 mineros a 720 metros de profundidad durante 69 días. La mina, ubicada en Caldera, Chile, era explotada por la compañía San Esteban Primera SA Horas después del accidente, se intentó un primer rescate a través de la chimenea de ventilación, mientras los mineros buscaban escapar por la escalera de emergencia, que resultó estar incompleta.

Con el tiempo, los familiares de los mineros llegaron al lugar, formando el Campamento Esperanza, que alcanzó los 3 mil habitantes. Un segundo derrumbe, el 7 de agosto , bloqueó la salida por el tubo de ventilación, dejando a los mineros completamente aislados . El gobierno de Sebastián Piñera pareció suspender el rescate, pero la presión de los familiares llevó a un nuevo intento bajo la dirección del ingeniero André Sougarret y el ministro de Minería Laurence Golborne, usando maquinaria pesada.

El 22 de agosto, tras 17 días de búsqueda, los mineros fueron encontrados. El presidente Piñera mostró la nota escrita por el minero José Ojeda: "Estamos bien en el refugio los 33" . Durante su encierro, los mineros se organizaron para racionar la comida, potabilizar agua y mantener la solidaridad, lo que les ayudó a preservar el optimismo y la convivencia.

"Estamos bien los 33": a 14 años del rescate de los mineros chilenos

El 26 de agosto se difundieron las primeras imágenes de los 33 mineros atrapados, donde enviaron saludos a sus familias y cantaron el himno chileno.

El plan de rescate

El rescate, llamado Plan San Lorenzo en honor al patrón de los mineros, consistió en tres operaciones simultáneas (planos A, B y C), cada una con equipos de perforación. La perforadora Schramm T-130 de la empresa estadounidense Geotec, parte del Plan B, comenzó a operar el 3 de septiembre, con el objetivo de llegar a un taller cercano al refugio a 620 metros de profundidad. Tras avanzar a 20 metros por día, alcanzó su destino el 9 de octubre a las 8:05 horas, convirtiéndose en la ruta de rescate.

Con asesoramiento de la NASA, se construyó la cápsula Fénix 2, de 3,95 metros de altura y 51 centímetros de ancho, para traer de vuelta a los mineros. El 12 de octubre, a las 23:19, descendió Manuel González, el primer rescatista. El protocolo de rescate, basado en técnicas de submarinos, determina el orden de salida: primero los más aptos esencialmente, luego los más débiles y finalmente los más fuertes psicológicamente.

Florencio Ávalos, de 31 años, fue el primero en ser rescatado a las 00:10 del 13 de octubre, tras un viaje de 40 minutos. Había estado atrapado 68 días. El último en salir fue Luis Urzúa, de 54 años, quien emergió a las 21:56 del mismo día, tras 69 días bajo tierra. Mil millones de personas en todo el mundo siguieron por televisión el histórico y exitoso rescate, que se convirtió en un hito de la minería mundial.

Noche histórica

El reloj marcaba exactamente las 00.05 del miércoles 13 de octubre de 2010 cuando el minero Florencio “Floro” Ávalos salió de la cápsula Fénix 2. Fue izado 722 metros desde las entrañas de la tierra y quedó enceguecido por los reflectores.

Junto con sus 32 compañeros que seguían abajo, había pasado 69 días enterrado en las profundidades de la  mina San José , en Atacama, desde el derrumbe del 5 de agosto. El último en salir fue Luis Urzúa, de 54 años, quien emergió a las 21:56 del mismo día, tras 69 días bajo tierra. Mil millones de personas en todo el mundo siguieron por televisión el histórico y exitoso rescate, que se convirtió en un hito de la minería mundial.

Durante ese tiempo estuvieron  17 días  completamente incomunicados  hasta que se supo que seguían vivos aun cuando el presidente chileno, Sebastián Pïñera , había intentado darlos por muertos a todos para evitar los costos de una incierta operación de rescate.