En la tarde del miércoles, Aníbal Lotocki se entregó a la Justicia y se presentó en una dependencia de la Policía Federal de la ciudad de La Plata, procesado por el delito de homicidio simple de Rodolfo Cristian Zárate. En horas de la noche, el médico fue trasladado a la alcaidía de la Superintendencia de Investigaciones de la Policía Federal Argentina (PFA), ubicada en el barrio de Villa Lugano, donde pasó la noche.

Hacia allí se dirigió el mediodía del jueves su esposa María José Favarón, quien llegó a la alcaidía a las 14.55 y fue abordada por la guardia periodística mientras presentaba la documentación correspondiente para ingresar al lugar. La mujer escuchó las preguntas sobre cómo había sido la detención y acerca del futuro de su marido, pero evitó dar respuestas. “No entré todavía, por favor”, manifestó dos veces ante la requisitoria periodística de El Diario de Mariana (América), mirando a cámara y levantando su mano derecha.

Favarón esperó unos segundos que le autorizaran el ingreso y estuvo solamente 8 minutos en la dependencia. A la salida, la mujer tampoco realizó declaraciones, aunque su abogado aseguró que a las 18 horas iban a hablar con la prensa, sin precisar la modalidad. A paso firme, ambos ingresaron a un vehículo y se retiraron del lugar.

Todavía se desconoce cuál será el paradero final del médico. Este último miércoles, la Sala IV de la Cámara Criminal y Correccional confirmó su procesamiento por el homicidio simple de su paciente Rodolfo Zárate, ocurrido tras una cirugía estética realizada en una clínica de Caballito en septiembre de 2021. Luego, los jueces Hernán López, Ignacio Rodríguez Varela y Julio Luciani pidieron su inmediata detención. “No es posible que un imputado con procesamiento confirmado por homicidio esté libre”, afirma una fuente judicial clave en el caso.

Preso

Ya había sido detenido por la muerte de Zárate en 2021, apenas había pasado unas horas preso. Nunca fue a prisión por las lesiones graves que sufrió Silvina Luna tras su cirugía, lesiones que la llevaron a la muerte. El Tribunal N°28 que lo condenó a cuatro años determinó que siga libre hasta que se le confirme la pena.