Por el agotamiento de la cuenca, dejó de operar la única refinería activa del norte del país

Refinor, una de las empresas más reconocidas en el sector energético argentino, ha anunciado el cierre de su destilería ubicada en el paraje Campo Durán, a aproximadamente 45 kilómetros al norte de Tartagal, en la provincia de Salta. Esta decisión se origina en el notable declive de la producción en la Cuenca Noroeste, que ha manifestado un agotamiento progresivo en los campos maduros de la región. 

En un comunicado oficial emitido, la compañía indicó que esta medida forma parte de una estrategia más amplia para reconvertir su modelo de negocio. Refinor busca adaptarse a los desafíos actuales que enfrenta el sector energético en Argentina, así como también aprovechar las nuevas oportunidades que surgen en el contexto de la matriz energética del país. 

La empresa subrayó la responsabilidad con la que se toma esta decisión, al considerar que el sostenido declive en la producción de petróleo en la cuenca NOA ha impactado considerablemente en la disponibilidad de crudo, lo que ha llevado a la actividad de refinación a convertirse en una opción antieconómica. 

Una fuente interna de la compañía complementó esta información al señalar que la falta de disponibilidad de crudo en los yacimientos del norte ha sido un factor determinante en la decisión de discontinuar la operación de refinación. Como parte de esta nueva dirección, Refinor ha decidido priorizar sus operaciones en el sector de gas natural, especialmente en el contexto de la reversión del Gasoducto Norte, lo que les permitirá garantizar un suministro constante de combustibles a su red de clientes. 

Esta reconversión refleja un intento por parte de la empresa de adaptarse a las nuevas realidades del mercado energético, reconociendo la necesidad de evolucionar en un entorno en constante cambio.