La selección sub 17 cayó en su enfrentamiento por el tercer puesto contra Mali. A pesar del esfuerzo, el equipo dirigido por Diego Placente no logró sobreponerse al poderío del equipo africano, que desde el inicio del partido impuso un ritmo vertiginoso y una presión constante sobre el equipo argentino.

La ausencia del talentoso Diablito Echeverri, afectado por el reciente fallecimiento de su abuela, se sintió en el desempeño del equipo, que no logró mostrar la solidez y el juego mostrado en encuentros anteriores. Mali, con una velocidad y destreza notables, tomó la delantera en el marcador en menos de diez minutos con gol de Diarra, manteniendo una constante presión que desequilibró a la defensa argentina.

A pesar de la destacada actuación del arquero Florentín, quien evitó múltiples ocasiones de gol, Mali logró ampliar su ventaja con goles de Doumbia y un golazo de Makalou, que selló el partido. Aunque el Diablito ingresó al terreno de juego en un intento por cambiar el rumbo del partido, su gol fue anulado por posición adelantada, y el equipo argentino no pudo revertir el marcador.