Los Wallabies sufrieron un nuevo golpe que lo relega a clasificar a la próxima fase del mundial de rugby. En un emocionante enfrentamiento en el moderno OL Stadium, con miles de fanáticos australianos que viajaron para apoyar a su equipo. Se enfrentó a Gales y sufrió una derrota aplastante de 40-6. Esta pérdida virtualmente elimina a Australia de los cuartos de final de la Copa Mundial de Rugby, una situación sin precedentes en su historia.

Faltando tan solo diez minutos para el final del partido, los seguidores australianos se retiraron del estadio con frustración y desilusión. Por otro lado, Gales se puso la chapa de candidato, listo para enfrentar a los Pumas argentinos en los cuartos de final si estos últimos logran superar a Chile y Japón en sus próximos encuentros.

Australia se enfrenta a una oportunidad efímera y casi imposible de avanzar en el torneo: debe vencer a Portugal en su próximo partido y esperar que Fiji no acumule más de cuatro puntos en sus dos próximos enfrentamientos contra Georgia y los portugueses. En efecto, el equipo australiano parece haberse despedido prematuramente de la competencia, marcando esta derrota como la peor en su historia en los mundiales, superando incluso la derrota sufrida ante Inglaterra en los cuartos de final en Japón 2019.