Tuvieron que pasar ocho años hasta que el mundo vio las fotos de lo último que vieron las turistas holandesas Kris Kremers y Lisanne Froon antes de morir en la selva de Boquete, en Panamá. Las imágenes abonan la teoría de un accidente en el que una de ellas murió en seguida y la otra pasó varias horas pidiendo ayuda.
Los últimos escenarios que retrataron Kris Kremers, de 21 años, y Lisanne Froon, de 22, fueron la noche del 8 de abril de 2014, cuando estaban sumergidas en la oscuridad y los sonidos de la selva alrededor del volcán Barú.
Así parece quedar en evidencia a juzgar por las 90 fotos recuperadas de la memoria de la cámara de una de ellas, que fueron tomadas entre la 1 y las 4 de la mañana del 8 de abril de 2014, informó esta semana el sitio italiano Tebigeek.

La cámara de fotos estaba adentro de la mochila azul que una mujer encontró a mediados de abril de 2014 en un arrozal cerca de un río, y que le entregó a la Policía de Panamá.

Además de la cámara de fotos los investigadores encontraron adentro de la mochila dos pares de anteojos de sol, ropa, 83 dólares, una botella de agua y el pasaporte de Lisanne.

Kris y Lisanne fueron vistas con vida por última vez el 1ro de abril de 2014, cuando se despidieron de la familia que las albergaba en Boquete. Las mujeres había viajado a Panamá para aprender español y hacer trabajo social, pero además decidieron explorar la selva por un sendero privado.

En algún momento de esa travesía una de las mujeres, supuestamente Kris, se lastimó la cabeza y por eso en una de las fotos publicadas recientemente se puede ver una cabellera rubia con restos de sangre.

También se puede apreciar más el lugar donde se encontraban mientras Kris estaba lastimada y Lisanne intentaba pedir ayuda con su celular. Sólo una de esas 77 llamadas se conectó, pero por pocos segundos debido a la mala señal.

De acuerdo a los autores Marja West y Jürgen Snoeren, la muerte de Kris y Lisanne "fue un accidente", pero años atrás el detective holandés Dick Steffens sostuvo la teoría de que una de las mujeres había sido víctima de una red de trata de personas.

La teoría de West y Snoeren parece tener más validez con las imágenes obtenidas de la cámara, pero no está claro quién tomó las fotos.

Dos semanas después de partir hacia el sendero del volcán Barú, los investigadores de la Policía de Panamá anunciaron que habían encontrado los restos de dos personas en esa zona (un hueso pélvico y un pie aún dentro de una bota) y así se dio por finalizada la búsqueda de las mujeres.

Sin embargo, nunca se descubrió cómo murieron ni qué les pasó.

Fuente: Minuto Uno