Una joven de Santiago del Estero le robó y clonó la tarjeta de la hermana de su amiga, pero una foto publicada en las redes sociales y la aplicación del banco terminaron de destapar la estafa. En consecuencia, la víctima la expuso en las redes sociales.

Male Schammas fue quien compartió su enojo en Twitter y escrachó a una de sus amigas más cercanas, identificada como Valentina Gigena, quien se tomó el trabajo de hurgar en las cosas de su hermana y copiar los datos de la tarjeta. “Fue para darse el lujo de pedir comida”, indicó.

Cómo se dieron cuenta de la estafa

De acuerdo con el relato de Schammas, en la noche del jueves 12 mayo, la madre de la joven se percató de que, desde la extensión de la tarjeta de su otra hija, habían realizado dos compras en lugares de comida. Sin embargo, la chica se encontraba cocinando a pocos metros de ella, por lo que “evidentemente alguien estaba usándole la tarjeta”.

“Cuando llamamos al dueño de uno de los locales preguntando el nombre del usuario de pedidos y reclamando que la titular de la tarjeta no había hecho la compra, nos dijeron: Valentina Gigena”, relató la antigua amiga de la estafadora.

Gigena y Schammas están íntimas amigas al punto de que convivían en la casa de la otra y compartían tiempo de calidad con las familias de cada una, según relató en su descargo en Twitter.

Al conocer el fraude, la joven se dirigió repleta de enojo a increpar a Valentina, pero, lejos de reconocer el engaño, le “mintió en la cara aun mostrando la compra hecha con la tarjeta, viendo que los números eran los de la tarjeta” en cuestión. La acusada, por su parte, alegó haber utilizado el plástico de su madre.

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