Dura advertencia de la Iglesia por la inflación y la inseguridad

El arzobispo de Rosario pidió que se actúe con “responsabilidad” y para solucionar “problemas estructurales”; se empieza a vislumbrar “la falta de alimentos”
jueves 21 de abril de 2022
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La profundización de la crisis social inquieta a la Iglesia. El arzobispo de Rosario, monseñor Eduardo Martín, alertó sobre los altos niveles de inflación, que impactan sobre la pobreza, y la creciente inseguridad que golpea a los ciudadanos, al reclamar a la dirigencia política nacional que actúe con responsabilidad para encontrar soluciones a “problemas estructurales de la Argentina”.

“Uno mira con preocupación la inflación, que carcome los salarios y provoca que la gente no pueda llegar a fin de mes. Eso hace más tensa la situación social, la pobreza y la falta de alimentos, que hoy se empieza a vislumbrar en algunos sectores”, dijo el arzobispo, en declaraciones al portal rosarino CLG Noticias Analizó con crudeza la situación del país, junto con el vicario general de la arquidiócesis, el padre Emilio Cardarelil.

La profundización de la crisis social inquieta a la Iglesia. El arzobispo de Rosario, monseñor Eduardo Martín, alertó sobre los altos niveles de inflación, que impactan sobre la pobreza, y la creciente inseguridad que golpea a los ciudadanos, al reclamar a la dirigencia política nacional que actúe con responsabilidad para encontrar soluciones a “problemas estructurales de la Argentina”.

“Uno mira con preocupación la inflación, que carcome los salarios y provoca que la gente no pueda llegar a fin de mes. Eso hace más tensa la situación social, la pobreza y la falta de alimentos, que hoy se empieza a vislumbrar en algunos sectores”, dijo el arzobispo, en declaraciones al portal rosarino CLG Noticias Analizó con crudeza la situación del país, junto con el vicario general de la arquidiócesis, el padre Emilio Cardarelil.

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“Estamos viviendo un contexto preocupante en nuestro país donde los Índices de inflación son altísimos: 6,7% en marzo, récord en 20 años, y un 55,1% de inflación interanual, lo cual es augurio de una mayor pobreza e indigencia”, pronosticó con preocupación el sacerdote Cardarelli, al describir un cuadro social alarmante.

El diagnóstico sobre la situación social no es aislado en la Iglesia y se suma a la reciente descripción del obispo de Lomas de Zamora y presidente de la Comisión Episcopal de Pastoral Social, Jorge Lugones, quien hace dos semanas advirtió que “los argentinos no pueden ser objeto de políticas de ajuste”, al criticar con dureza el acuerdo del gobierno de Alberto Fernández con el Fondo Monetario Internacional (FMI).

A lo largo de 2021, Cáritas Argentina ofreció ayudas en alimentos y en programas de promoción humana a 688.000 personas, un universo que se quintuplicó respecto del año anterior, a raíz de la profundización de la crisis.

Al transmitir la preocupación compartida porque la dirigencia política “no encuentra el camino” para afrontar problemas estructurales como la pobreza y la violencia urbana, el arzobispo Martín y el sacerdote Cardarelli pidieron “seriedad, humildad y responsabilidad” para superar la situación.

Nacido en Venado Tuerto, en diciembre de 1953, Martín fue designado obispo de Río Cuarto en 2006, por Benedicto XVI, y el papa Francisco lo promovió en 2014 como arzobispo de Rosario. En el Episcopado integró la Comisión de Pastoral Social y estuvo al frente de la Comisión de Educación Católica, dos áreas consideradas claves por la Iglesia

En la arquidiócesis de Rosario, la Iglesia atiende necesidades sociales en 120 parroquias y en casi un centenar de capillas, merenderos y comedores, en siete departamentos del sur de la provincia de Santa Fe, un conglomerado que comprende barrios de emergencia y villas en zonas cercanas a la ciudad y poblaciones rurales. A través de Cáritas, se entregan bolsones de alimentos a unas 20.000 familias por mes.

La inflación golpea, incluso, a la propia asistencia de la Iglesia, porque los convenios con los gobiernos nacional y provincial son anuales y se actualizan cada seis meses. “A los tres meses, con los mismos recursos se pueden repartir menos alimentos, y cuánto más sube la inflación, más altas son las demandas de las familias”, comentó a LA NACION un dirigente de Cáritas.

Violencia urbana

En lo que va del año, en Rosario se cometieron 83 homicidios, en un clima de violencia, emparentada con el narcotráfico, que se extiende en la zona desde hace una década. Hace dos días, por ejemplo, se cometieron seis crímenes y cinco de ellos presentaron el sello de la mafia.

Monseñor Martín advirtió que “la violencia y la inseguridad, desgraciadamente, también forman parte de este panorama y las autoridades no encuentran el modo de poder acotar estos flagelos”. Dijo, al respecto, que diariamente se observa una situación de mucha crispación y enfrentamiento entre las personas al transitar la calle.

“Urge encarar estos temas con responsabilidad y seriedad. La dirigencia debe adquirir una gran dosis de humildad; lo decíamos años anteriores, nuestra historia reciente nos dice que ninguna fuerza política por sí sola puede resolver los grandes problemas de la Argentina, como la pobreza estructural”, sostuvo el padre Cardarelli.

“Es necesario buscar acuerdos que trasciendan a los gobiernos para poder salir de una buena vez de una situación que nos agobia. Para esto se requiere humildad, el camino que nos señala el hijo de Dios para alcanzar una vida plena; vamos a acceder a una vida mejor y más digna en la medida en que todos, especialmente la dirigencia, seamos capaces de esta humildad que nos lleve a poder reunirnos, encontrarnos y buscar políticas de Estado”, precisó el padre Cardarelli.

Fuente: La Nación