Alimentación consciente: 3 ideas para una buena digestión

Las Neurociencias Cognitivas intentan comprender las bases neurobiológicas de los procesos mentales y entender cómo estos influyen en nuestra conducta. ¿Por qué no en el comportamiento alimentario?

¿Puede la atención influir en la manera en que comemos?

La atención es la orientación y focalización del recurso intelectual hacia percepciones sensoriales y operaciones cognitivas determinadas. Puede dirigirse pero también puede dispersarse de manera automática. Todos los días estamos expuestos a centenares de estímulos relacionados con la comida que disparan automáticamente nuestra atención.

La atención suele dispararse automáticamente frente a aquellas características de las comidas más relacionadas con el placer (generalmente aquellas ricas en grasas y azúcar), lo que a su vez promueve respuestas más automáticas e impulsivas a la hora de comer.

¿Cómo influye nuestra no atención en la forma en que comemos?

El no prestar atención a aquello que estamos comiendo (porque al mismo tiempo estamos realizando otra cosa: mirando una serie, jugando en la computadora, mirando una película en el cine o conversando con amigos, por ejemplo) hace que: estimemos inapropiadamente lo que consumimos y tomemos, por lo tanto, malas decisiones acerca de cuándo parar de comer; que no se sienta menos sensación de saciedad o que recordemos menos lo que comemos y por lo tanto comemos más en ese momento y a lo largo del día.

Aquí, 3 tips:

 
 
Nuestro cuerpo necesita 20 minutos aproximadamente para recibir la señal de saciedad. Muchas personas comen demasiado rápido, por lo que pasado este tiempo, posiblemente, ya hayan comido de más. Se recomienda comer una porción moderada en el transcurso de 20 minutos y prestar atención a la sensación de saciedad.

Fuente: Infobae