El derrotero político de Capitanich con desmontes en Chaco

Un problema de larga data que comenzó a explayar sus efectos en el territorio provincial que incluye también las consecuencias ambientales presentes
miércoles 26 de enero de 2022
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La cuestión del desmonte ilegal en Chaco cruzó límites que parecían inalcanzables y las consecuencias se están sintiendo en la población de la provincia. De esta manera, se ratifica el derrotero político del gobernador Jorge Capitanich, quien el año pasado buscó avanzar en el ordenamiento territorial de bosques, pero sin consenso de las organizaciones ambientalistas, según denunciaron estas últimas.

En este sentido, Somos Monte Chaco, una organización de ciudadanos chaqueños que luchan contra este tipo de prácticas en espacios verdes, emitió este martes una alerta sobre la situación del desmonte ilegal, lo cual está trayendo “días de fuego, sequía y calor” extremo en la provincia. De hecho, consideran que “no” se trata de calor en sí, sino que “es desmonte, negociados, falta de compromiso e ignorancia”, en una clara advertencia sobre las acciones de la Gobernación al respecto.

Para poder explicar qué está pasando en la provincia del norte argentino, la organización difundió un video en donde muestran distintas consecuencias del desmonte ilegal. “Enero debería ser la estación más lluviosa del año en Chaco, pero las hojas se caen de los árboles y éstos están secos como si fuera agosto”, reflejó una voz en off mientras mostraba un suelo colmado por hojas caídas y secas.

Seguidamente, se pasó a la imagen de un termómetro indicando los “41 grados y medio, 42 grados” que azotan al territorio chaqueño. “Estas son las temperaturas acá desde hace 15 días casi”, advirtió el mismo integrante de Somos Monte Chaco. Y luego, se trasladó a un río prácticamente sin agua. “El río cómo está. Esto hace dos años que está así, seco. Llueve un rato, se llena pero al toque ya está bajo de nuevo”, explicó.

Para sustentar lo anterior, se citó la siguiente declaración de la meteoróloga Cindy Fernández, quien remarcó: “Estamos viviendo de las jornadas más calurosas en la historia, con muchos días de cielo despejado, donde la radiación solar es muy intensa y en un contexto de sequía extrema”. “Argentina hace dos años que está atravesando sequias muy prolongadas”, aseveró.

¿Por qué está pasando todo eso?

“Hay varias razones”, remarcaron desde Somos Monte Chaco, y mientras se muestra un mapa del recorrido del viento en el norte del país, subrayaron: “Miremos el viento. Viene del sur de Bolivia, cruza todo el Chaco paraguayo y entra a Argentina por Formosa y Chaco”. “Pero en el Gran Chaco, ¿qué pasó en estas décadas?”, se pregunta la misma voz en off y afirma: “Esto”, mientras se reproduce una serie de imágenes de desmontes en espacios forestales chaqueños.

De esta manera, ocurre lo siguiente: “Si los rayos solares encuentran un bosque apuntan a los árboles y se generan nubes, pero si encuentran un suelo pelado, todo el calor se transfiere al viento y al aire”. Y precisó que “según el WWF (Fondo Mundial para la Naturaleza), en los últimos 13 años se han destruido 7 millones de hectáreas de bosque en el Gran Chaco”. Con lo cual, desde la organización pidieron “abrir los ojos”.

Capitanich y el “no consenso”

Las organizaciones de la sociedad civil participantes de la Comisión de Bosques y Biodiversidad del Consejo Provincial del Ambiente manifestaron en junio pasado que el gobernador Capitanich propuso mesas de diálogo para Ordenamiento Territorial de Bosques Nativos (OTBN) de Chaco, pero “sin respetar acuerdos”, denunciaron. “Se inició el proceso de participación sin que la mesa creada para diseñarlo haya arribado a la elaboración y aprobación de un plan”.

En total, fueron 14 las organizaciones que rechazaron el proceder del mandatario provincial en una carta elevada a funcionarios de éste. El motivo del alejamiento fue una serie de anuncios de Capitanich, quien de manera inconsulta dio a conocer cuál será el nuevo mapa de ordenamiento territorial provincial e invitó a una serie de charlas para abordar el tema, según consignó Tierra Viva.

La tensión tiene su punto de ebullición máximo en el avance de las topadoras, las cuales siguen desmontando más allá de que la Justicia chaqueña emitió un fallo a fines de 2020 que suspende toda modificación del uso del suelo hasta que se haya actualizado el Ordenamiento Territorial. No obstante, las actividades se siguieron desarrollando con cifras verdaderamente preocupantes.

Chaco, la provincia que más bosques perdió

Según un informe elaborado por el propio Estado nacional, Chaco es la provincia argentina que más bosques perdió en el período 2016-2019: se contabilizan unas 130.487 hectáreas deforestadas. Cabe advertir que muchos de los desmontes se realizaron en zonas donde no está permitido, según lo establecido por el artículo 14 de la Ley 26.331 (Categoría I, rojo y II, amarillo), advirtió Greenpeace en una carta abierta dirigida a Capitanich.

En tanto, datos oficiales indican que desde la sanción de la ley 26.331 en la provincia de Chaco se desmontaron 390.668 hectáreas. A raíz de ello, las organizaciones ambientales salieron al cruce del ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Juan Cabandié, y le pidieron que garantice la participación ciudadana en la futura regulación de los desmontes.

Qué dice Capitanich sobre el ordenamiento territorial de bosques

En mayo último, vía Twitter, el mandatario chaqueño informó sobre la cuestionada teleconferencia con distintos actores para la "presentación final de la actualización del Ordenamiento Territorial de Bosques Nativos incrementando áreas rojas y amarillas a los efectos de optimizar el aprovechamiento de las zonas verdes”, remarcando el objetivo de “compatibilizar la expansión de la capacidad productiva con maximización de zonas de protección”.

Por su parte, desde la cartera chaqueña de Desarrollo Territorial y Ambiente lanzaron los talleres de participación social para los municipios de cada región, previstas a desarrollarse en tres etapas (informativa, de consulta y de validación con la comunidad). Pero las organizaciones demandan “explicaciones y justificaciones claras y valederas para poder retomar un diálogo que fortalezca la democracia y que justifique decir públicamente que hay diferentes sectores participando de la actualización”.

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Fuente: El Intransigente