Por primera vez en la historia se redujo el número de jubilados a cargo de la Anses

La seguridad social suma menos perceptores por retiros, moratorias y de pensiones contributivas que en 2017. Los motivos de esta inusual tendencia
lunes 06 de diciembre de 2021
Por primera vez en la historia se redujo el número de jubilados a cargo de la Anses
Por primera vez en la historia se redujo el número de jubilados a cargo de la Anses

Con la pandemia se produjo una situación excepcional: el sistema de la seguridad social suma menos jubilados y beneficiarios de pensiones contributivas que en 2017. Lo normal es que este universo aumente al ritmo del crecimiento vegetativo de la población, pero el flagelo del COVID-19 revirtió su evolución.

La Anses (Administración Nacional de Seguridad Social) informó que dentro de los Sistema Integrado Previsional Argentina (SIPA) había al cierre de junio de 2021 unos 5.618.873 beneficiarios, es decir unos 80.701 o 1,4% menos que los 5.699.574 registrados en el promedio de 2020. Y unos 108.371 o 1,9% menos que el promedio de 2019, antes de la pandemia.

Asimismo, el número de haberes por jubilaciones y pensiones con aportes alcanzaba en enero de 2020 a 6.936.227 beneficios, mientras que en junio de 2021 -último dato disponible- se había reducido a 6.823.435, con una caída de 1,6% o 112.792 perceptores. Recuerdan los expertos que en el sistema previsional hay quienes pueden recibir una pensión por su cónyuge o conviviente fallecido y, por tal motivo, el número de haberes pagados es superior al registrado por su número de CUIT o CUIL.

De esta forma, el número de jubilaciones y pensiones con aportes retrocedió por un lapso de 17 meses consecutivos, para quedar en un nivel inferior a la de 2017: al finalizar aquel año, sumaban 6.892.552 haberes.

Hay que buscar las causas de esa caída en el efecto coronavirus, tanto por las restricciones a la actividad -que demoraron las altas por parte de Anses, debido a las dificultades administrativas que implicó el confinamiento-, como por los decesos debidos a la pandemia, que en mayor proporción impactaron en la población de adultos mayores.

Causas de las bajas

“¿A qué se debió la baja? El año pasado la Anses cerró sus puertas en marzo a pesar de ser esencial. Y las empezó a abrir paulatinamente a partir de julio. A los tres meses establecieron un sistema de atención virtual que funcionó lento, con mucha complicación, lo cual terminó con que el año pasado se iniciaron poco más de 100.00 trámites, cuando estadísticamente se daban de alta unas 200.000 jubilaciones promedio al año, si se toman en cuenta los últimos cinco años anteriores a la pandemia”, precisó a Infobae la abogada Andrea Falcone, especialista en sistema previsional.

“La baja en el número de personas que reciben el beneficio tuvo más que ver con que Anses cerró. Y sí, un poco más de gente murió respecto a años anteriores, pero básicamente fue porque el organismo dejó de trabajar”, agregó Falcone.

En cuanto al aspecto sanitario, la Argentina superó los 116.000 decesos por coronavirus y cerca del 80% de los fallecidos correspondió a la franja etaria de mayores de 60 años.

Un tercer punto para explicar esta regresión en la cantidad de pasivos con aportes puede buscarse en el deterioro del mercado laboral en la Argentina, pues menos personas se retiran con la acreditación de aportes completos y más deben recibir cobertura previsional a través de pensiones no contributivas.

Este universo aumentó en 93.413 beneficiarios o un 5,8%, desde 1.601.405 en enero de 2020 a 1.694.818 en junio de 2021. Este grupo está compuesto por los perceptores de haberes por invalidez, para madres con siete o más hijos y de la Pensión Universal para el Adulto Mayor (PUAM), entre otros.

Puntualmente el número de beneficiarios de la PUAM creció en 43.969 personas o un 27%, desde los 162.294 haberes por ese concepto en enero de 2020 a las 206.263 prestaciones en junio de 2021.

La letalidad de la pandemia

Un fenómeno que se dio a escala global -y que Argentina no fue la excepción- fue que los adultos mayores fueron las principales víctimas fatales de los contagios de coronavirus. Una de las primeras certezas que la comunidad científica recibió a medida que el COVID-19 se expandía por el mundo era: a mayor edad, más probabilidades de muerte.

En Argentina, la franja etaria que se extiende desde los 60 años de edad hasta los pacientes más longevos de más de 100 años, representa casi el 80% de los muertos en el país en toda la pandemia.

Con datos actualizados a julio pasado, cuando se produjo un pico de decesos y contagios, los más perjudicados fueron los mayores de 80 años, que acumulaban cerca del 30% entre los más de 100.000 muertos registrados entonces, según los datos del Ministerio de Salud. Les siguieron entre las franjas etarias más afectadas el grupo de 70-79 años con un 27% de las muertes y 60-69 años con un 22% del total. Y el riesgo de morir continúa en descenso a medida que baja la edad.

El haber jubilatorio mínimo, ahora en $29.062, registró un un incremento de 107% desde diciembre de 2019, cuando asumió el presidente Alberto Fernández.

Fuente: Infobae