Un argentino viajó a España para matar a su ex y a sus hijos: está detenido

Alejandra se mudó a Madrid luego de varios años de violencia de género, pero quien era su pareja llegó a su ciudad, intentó colocarle un GPS en un auto para seguirla y asesinarla
viernes 02 de junio de 2023
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Un hombre de nacionalidad argentina viajó a España con la intención de matar a su exesposa y sus hijos, luego de intentar seguirla con un GPS, quedó detenido en Madrid.

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Alejandra vive en las afueras de Madrid. La semana pasada, cuando regresó a su casa, encontró un celular en la cochera individual. El teléfono tenía cinta adhesiva. Estaba con la batería a la mitad. Primero le pareció extraño. Después comprendió: alguien lo había pegado debajo del auto para monitorear sus movimientos a través del GPS del aparato. Ese alguien, denunciaría inmediatamente en la comisaría, podría ser su exmarido.

La mujer realizó la denuncia y la policía española identificó al titular del teléfono móvil secuestrado. Los investigadores determinaron que fue adquirido en España con un pasaporte argentino a nombre de Di Stefano. Había ingresado a España un mes antes y se habría alojado en un hotel, pero la justicia española ordenó la detención y lograron arrestarlo en el aeropuerto de Barajas cuando intentaba subir a un avión rumbo a la Argentina.

"Nos mudamos después de 30 denuncias por amenazas, 12 perímetros de exclusión, nos vinimos acá tratando de encontrar paz, y cuando llego del colegio veo algo tirado en el garaje", indicó M. Alejandra en Crónica TV. La víctima explicó que se trataba de un celular encintado que estaba en el piso y que contenía un GPS para seguir los movimientos mientras la mujer hacía sus actividades.

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Carlos Marcelo Di Stefano.

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Según los registros, Di Stefano ingresó a España el 24 de abril, vivió los primeros tres días en un hostal de la capital, luego alquiló un auto y viajó al barrio de Alejandra, y durmió las siguientes noches en el vehículo. Para los detectives no hubo dudas: estuvo al acecho. Y advirtieron que la vida de Alejandra corría “riesgo extremo”.

En la resolución, la jueza española que tomó el caso concluyó que existían “indicios racionales de criminalidad suficientemente importantes frente a Di Stefano por un presunto delito de 172 ter del Código Penal. El objetivo de Di Stefano era conocer los lugares frecuentados por Alejandra y su familia, tenerlos controlados, y para ello colocó un dispositivo móvil en los bajos del vehículo, siendo que no puede descartarse su intención de atentar contra ella”.

Y subrayó: “Alejandra está atemorizada, salió de su país para encontrarse a salvo y ahora que ha sabido que él está en España su intranquilidad es constante».

En consecuencia, la magistrada ordenó “la prohibición de aproximarse a Alejandra y sus hijos menores de edad en un radio menor a mil metros así como en la misma distancia a su domicilio, su lugar de trabajo o cualquier lugar en el que esta se encuentre o frecuente y la prohibición de comunicación con estas personas por cualquier medio, ya sea escrito, verbal o telemático” y “la prohibición de entrada y permanencia en Pozuelos de Alarcón”, donde vive la denunciante con la familia.

Para garantizar la integridad física de Alejandra y la familia, la jueza dispuso que a Di Stefano le colocaran una pulsera electrónica.