Además de la sequía, ahora una plaga amenaza al ganado

Productores ganaderos de la zona centro del país, advirtieron acerca e la proliferación de un escarabajo que vive en las pasturas y es tóxico para lo0s vacunos.
miércoles 25 de enero de 2023
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La sequía no solamente significa una pobre producción agrícola o la falta de pasto y agua superficial para el ganado, sino que también trae consigo un vasto número de problemáticas.

En las últimas horas comenzó a circular por las redes vídeos y fotos de vacas y caballos pastando en campos infectados de escarabajos, que estarían provocando enfermedades digestivas y en algunos casos la muerte de los animales que ingieren estos insectos.

El responsable de esta situación es el astilo moteado, una especie de escarabajo de la familia Melyridae, conocido en el campo y también llamado como “escarabajo del polen” o “siete de oro”. El insecto es una especie nativa de Argentina y se alimenta de polen, por lo cual es muy común verlo en el maíz, la soja y el girasol cuando se encuentran en plena floración.

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Si bien no es reconocido como un insecto que per se ocasione daños a los cultivos, cuando su número se vuelve muy grande genera problemas. De hecho, el Ingeniero Agrónomo Ariel Pereyra publicó en las últimas horas en sus redes sociales imágenes impactantes de ganado alimentándose en lotes plagados de estos insectos y muriendo a causa de una supuesta intoxicación por la ingesta del astilo moteado. Asimismo, el Servicio de Diagnóstico Veterinario Especializado del INTA Balcarce también dio cuenta de esta problemática.

En diálogo con Infobae, el veterinario y becario del Conicet que desarrolla su trabajo en el INTA Balcarce, Juan Agustín García, comentó que donde más presencia del astilo se registra hoy es en el norte de Buenos Aires y sur de Santa Fe y Córdoba.

“Este insecto es un polinizador de ciertos cultivos de esta región, pero con la gran sequía y el atraso de la floración de estos cultivos se trasladó a los lotes con alfalfa (implantada para alimentación animal), que está en plena floración”.

Como explicó García, al no estar los cultivos clásicos o no haberse producido la floración de los mismos en esta época, el astilo busca otras plantas en floración para alimentarse, como es el caso de la alfalfa.

El problema radica en la masividad de los insectos sobre las flores de esta última y que, al ser tantos, las vacas o caballos no pueden evitar ingerirlo junto con las plantas cuando están posado en ellas. Esto quiere decir que la ingesta es accidental.

“No está confirmado, pero hay asociaciones de causales fuertes entre la entrada de animales a comer alfalfa con una gran cantidad de astilos con problemas intestinales, diarrea y ciertas mortandades. Esto está en estudio, porque es un bicho que siempre ha estado, pero esta vez en una cantidad mayor”, relató García.

Así, el veterinario e investigador detalló que cuando se realizaron las necropsias a los animales afectados “lo encontramos (al escarabajo) en el rumen y vimos lesiones entéricas que son muy parecidas a unas registradas hace 40 años en Sudáfrica por esta misma razón. Todavía debe ser confirmado mediante investigación. La asociación es fuerte, pero hay que estudiarla”.

Es por esta situación que García realiza una serie de recomendaciones para evitar que la hacienda u otros animales coman de manera accidental al astilo.

En este sentido, explicó que si bien cada explotación tiene características propias, lo ideal es que los animales no ingresen a estos lotes con alfalfa en floración y se registre mucha presencia de estos escarabajos”.

“Pero si no queda otra chance, estamos recomendando en lo posible hacer un corte de la floración, porque al ser un animal polinizador, una vez que cae la flor y se seca, se transporta a otro lado y recién ahí hay que permitir que las vacas entren a comer. También cuando hay un nivel bajo de floración”, marcó el especialista.

Por último, el especialista subrayó la importancia de que “en lo posible, no entrar con una carga muy intensa (de ganado a los lotes), que obliga a los animales a comer los insectos que están sobre la flor, al mismo tiempo que sostuvo que “hay que tener en cuenta es que estos bichos son más activos a la tarde y probablemente cuando los animales vayan a comer estos vuelen y no haya tanta ingesta accidental. Son todas medidas para minimizar o evitar el consumo”.

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