La región vive tiempos convulsionados que amenazan la democracia

La intentona golpista en Brasil es el ejemplo más contundente de la difícil realidad sudamericana. También hay violentas protestas en Bolivia y Perú.
sábado 14 de enero de 2023
Nuevas protestas sacuden el sur del Perú exigiendo la salida de la presidenta Dina Boluarte (Foto: AFP)
Nuevas protestas sacuden el sur del Perú exigiendo la salida de la presidenta Dina Boluarte (Foto: AFP)

La región vive tiempos convulsionados. No solo por la difícil situación económica y social profundizada por la pandemia, sino también por crisis políticas y hasta intentos de golpes que pusieron en jaque la estabilidad de las democracias sudamericanas.


El caso de Brasil es sin dudas el más grave con una frustrada asonada golpista llevada adelante por bolsonaristas radicales que buscan derrocar al presidente, Luiz Inácio Lula da Silva, y reponer en el poder a Jair Bolsonaro. Pero la crisis no es monopolio brasileño. Perú y Bolivia están golpeados por acciones violentas, mientras otros países, como Colombia, se ven sacudidos por un escenario de máxima tensión.

Se trata de un contexto peligroso. “Estos ejemplos responden, naturalmente, a circunstancias diferentes en cada caso, pero hay condiciones compartidas por la región que están influyendo en estas convulsiones”, dijo a TN la subdirectora para América Latina y el Caribe del Crisis Group, Renata Segura.

Las causas de la crisis que empuja a la región hacia un futuro incierto


En ese marco, se realizará la próxima cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), prevista en Buenos Aires el 24 de enero. La reunión se enfocará en la defensa de la democracia brasileña, pero amenaza con provocar algunas desavenencias en el caso peruano que enfrenta a Lima con varios países del área, entre ellos Argentina.

Segura enumeró algunas de las causas de esta coyuntura política y social. “En primer lugar, hay una polarización muy fuerte en muchos de los países latinoamericanos”, destacó.

    Nuevas protestas sacuden el sur del Perú “La emergencia desatada por el COVID y la crisis económica que le siguió solo ha ayudado a resaltar los grandes problemas de inclusión social, política y económica que existen en la región”, agregó.

Qué está pasando en Brasil, Bolivia y Perú
Un breve repaso por el mapa de la región muestra los tres países que hoy afrontan situaciones de grave riesgo institucional con acciones violentas.

Dina Boluarte pidió perdón por la crisis, pero dejó en claro: “No voy a renunciar”
  • Brasil. Cientos de manifestantes bolsonaristas irrumpieron el 8 de enero en el Congreso, el palacio presidencial y la Corte Suprema. Impulsaban la destitución de Lula y el regreso de Jair Bolsonaro. Unas 1500 personas fueron detenidas. El gobierno prometió identificar a los participantes y financistas de la asonada. El mandatario acusa al expresidente de instigar a la rebelión. La condena al intento de golpe ha sido generalizada en la región.
  • Perú. Pedro Castillo disolvió el Congreso en un intento de autogolpe el 7 de diciembre. El Parlamento lo destituyó y asumió su vice, Dina Boluarte. Desde entonces, seguidores del exmandatario realizan protestas. Más de 45 personas murieron en enfrentamientos. Los manifestantes reclaman la salida de Boluarte, la disolución del Congreso y la convocatoria a elecciones. Los gobiernos de Argentina, Colombia, Bolivia y México pidieron la restitución de Castillo en el cargo.
  • Bolivia. El 29 de diciembre fue detenido el líder opositor y gobernador de Santa Cruz de la Sierra, Luis Camacho. Está acusado de impulsar en 2019 un golpe junto a la expresidenta Jeanine Áñez para provocar la caída de Evo Morales, a quien acusaban de fraude. Sus partidarios realizan periódicas protestas para exigir su liberación y responsabilizan al gobierno de Luis Arce de su arresto. La derecha denuncia una dura represión del gobierno.

    Pero no son los únicos países donde en los últimos tiempos se han vivido situaciones violentas. En medio de una fuerte tensión y acusaciones cruzadas entre el gobierno de Alberto Fernández y la oposición, Argentina fue sacudida por el intento de asesinato de la vicepresidenta Cristina Kirchner el 2 de septiembre pasado. Una situación similar denunció su par colombiana, Francia Márquez, la primera afrodescendiente en asumir el cargo en su país.

Márquez dijo que su custodia desbarató el martes 10 de enero un intento de atentado contra su vida, al desactivar una bomba de 7 kilos colocada en un camino que conduce a su casa particular en la zona del Cauca, sur del país. El gobierno del presidente colombiano, Gustavo Petro, lleva adelante difíciles negociaciones de paz con distintos grupos armados activos, como el ilegal Ejército de Liberación Nacional (ELN).

     Gustavo Petro y su vice Francia Marquez (Foto: REUTERS/Luisa Gonzalez)Por: REUTERS
    
Gustavo Petro y su vice Francia Marquez (Foto: REUTERS/Luisa Gonzalez)Por: REUTERS


También Chile vive un escenario de tensión constante en el sur del país a causa del conflicto mapuche. Los ataques incendiarios o con armas de fuego se han multiplicado en la zona desde la asunción del presidente Gabriel Boric.

En Venezuela la oposición sigue denunciando el hostigamiento constante del gobierno de Nicolás Maduro. La opositora Plataforma Unitaria denuncio una nueva ola de persecuciones, a través del Poder Judicial, para detener o amedrentar a miembros de la Asamblea Nacional electa en 2015 que siguen reclamando una salida democrática en el país.

El escenario que se viene en la región


Para Segura, las causas de estas crisis no son nuevas. “El COVID ayudó a desnudar estas fuertes tensiones producidas por la inequidad que ya había empezado a llevar a la gente a las calles a finales del 2019, y la dificultad que han tenido los Estados latinoamericanos de tramitar esas demandas de manera pacífica y efectiva ayudan a que germinen estos casos de violencia”.

La analista del Crisis Group afirma: “Si la región sigue teniendo los problemas económicos que hoy enfrenta (o hay una recesión), las demandas de la población solo seguirán subiendo. Hay una nueva ola de partidos de izquierda que han priorizado en el discurso el bienestar de los más vulnerables, pero llegan al poder en momentos difíciles para los Estados latinoamericanos y tendrán grandes retos”.

“Es muy posible que volvamos a ver grandes movilizaciones en las calles (seguramente de parte de las oposiciones) y que haya más incidentes violentos como los que hemos visto”, concluyó.

Fuente: TN