Día Internacional del Aire Puro: campañas 2022
Cada tercer jueves de noviembre se celebra el Día Internacional del Aire Puro.
Esta fecha fue instituida por la OMS (Organización Mundial de la Salud) en 1977, a raíz de la preocupación que existe mundialmente por la contaminación ambiental y el daño que las emisiones de gases ocasionan en la salud de las personas.
En Tucumán
Con respecto a la fecha la referente del Programa Provincial de Lucha Antitabáquica, neumonóloga Ariela Tarcic, contó: “Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el humo de tabaco es el principal contaminante de los ambientes cerrados y un importante contaminante del medioambiente en general. Este humo contribuye a que miles de toneladas de carcinógenos humanos, tóxicos y gases de efecto invernadero se liberen al aire que respiramos todos”.
“El humo de tabaco contiene unas 7500 sustancias muchas de ellas muy tóxicas y unas 70 que causan cáncer. Este humo causa daño a las personas y los animales que se exponen a él (humo de segunda mano). El humo del tabaco contiene también tres tipos de gases de efecto invernadero que contaminan el aire interior y exterior: dióxido de carbono, metano y óxidos de nitrógeno. Además, suspendido en distintas superficies como sillones, cortinas, polvo y demás lugares, se sigue liberando en el ambiente, horas, días y hasta meses más tarde (humo de tercera mano)”.
Al mismo tiempo que enfatizó: “El humo de cigarrillo es el principal contaminante de los ambientes cerrados, causando enfermedad y muerte a millones de personas en todo el mundo. Además, es un importante causante de contaminación ambiental. La exposición al humo de tabaco de segunda mano se asocia con un 20-30% más de riesgo de enfermedad cardiovascular y cáncer de pulmón en los adultos expuestos. Los hijos de fumadores expuestos en sus hogares tienen mayor riesgo de sufrir síndrome de muerte súbita, otitis a repetición, infecciones, trastornos del aprendizaje, del comportamiento o del sueño; así como también mayor riesgo de adicción al tabaco en la adolescencia, y cáncer de pulmón en la edad adulta, entre otros. Los riesgos para la salud del humo de tercera mano aún están en estudio”.
El Programa Nacional de Control del Tabaco(PNCT) del Ministerio de Salud de la Nación fue implementado con un enfoque integral desde fines del 2003 y aprobado por la resolución 1124 en agosto 2006. Entre sus principales objetivos están el evitar el inicio del consumo y proteger a la población de la exposición al humo de tabaco. La ley 26.687 de 2011 estipula que se prohíbe fumar sostener encendido un producto elaborado con tabaco, en todos los espacios cerrados sean públicos o privados, esto incluye también el uso de cigarrillos electrónicos que emiten un aerosol que contiene sustancias tóxicas para la salud.
“La última encuesta sobre consumo de tabaco tanto en adultos como en adolescentes fue en 2018. La aparición de COVID 19 en muchos países se asoció con un mayor consumo de tabaco. Las próximas encuestas nos mostrarán el efecto que esto tuvo en nuestro país”, destacó Tarcic.
En 2022, el Día Mundial sin Tabaco se enfocó particularmente en los efectos que tiene el tabaco en el medioambiente y las acciones realizadas durante ese evento tuvieron un impacto particularmente importante en los jóvenes. Las leyes de ambientes cerrados 100% libres de humo y las leyes destinadas a la protección del medioambiente (por ejemplo, la prohibición de fumar en playas o en parques concurridos por niños) aplicadas junto con las acciones de comunicación y otras intervenciones son clave para generar un cambio cultural en la población joven que está muy involucrada en la preservación del medioambiente.
Respira vida: el camino a casa
El aire limpio y los Objetivos de Desarrollo Sostenible
En el documento final de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Desarrollo Sostenible, titulado “El futuro que queremos”, los países se comprometieron a promover políticas de desarrollo sostenible que contribuyeran a la buena calidad del aire en el contexto de las ciudades y los asentamientos humanos sostenibles. Asimismo, la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible reconoce —en su hoja de ruta para lograr el desarrollo sostenible, la protección del medio ambiente y la prosperidad para todos—que reducir la contaminación atmosférica es importante para el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
