De cara al 2023, Gabriel Yedlin regresa a la Legislatura de Tucumán
Este viernes, el dirigente manzurista Gabriel Yedlin, anunció que regresará a Tucumán para ocupar su banca en la Legislatura que había conseguido en las elecciones de 2019.
A través de las redes sociales, el exministro tucumano, explicó su alejamiento como titular de la Unidad Ejecutora Norte Grande para la Equidad Social, dependiente del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación.
“Vuelvo a dedicar todo mí tiempo a mí querida provincia, ahora desde la Legislatura de Tucumán, donde volcaré mí experiencia en temas sociales, impulsando y promoviendo leyes que mejoren la vida de todos los tucumanos y tucumanas”, dijo en su cuenta de Twitter.
Yedlin había asumido como funcionario nacional en abril de este año, tras haberse desempeñado como ministro de Desarrollo Social de la Provincia.
En 2019 había obtenido una banca por el oficialismo, pero tras recibir una licencia del cuerpo colegiado, ese escaño fue ocupado por el ex ministro de Desarrollo Productivo, Juan Luis Fernández, quien ahora dejará de formar parte de la conformación parlamentaria.
El anuncio de Yedlin, además, se da en la semana de la confirmación de la renuncia de Juan Zabaleta como ministro de Desarrollo Social de la Nación. Este jueves, el presidente Alberto Fernández le tomó juramento formal en ese cargo a la nueva titular, Victoria Tolosa Paz.
Manzur retomará la gobernación de Tucumán en diciembre
La decisión ya está tomada y se haría efectiva a fines de diciembre. El argumento que le dio al Presidente es que debe volver a Tucumán, su pago chico, donde tiene que jugar un rol en las elecciones. Si bien no puede ser candidato a gobernador, los encuestadores le indican que mantiene un 60% de intención de voto y quiere aprovecharlo apareciendo en algún lugar de la boleta.
En la mesa chica albertista saben que todos sus planes para 2023 están muy atados a trabar la derogación de las PASO que impulsan los gobernadores peronistas y respalda parte del kirchnerismo. Es por eso que en el entorno del presidente salieron a boicotear el plan.
Otro síntoma de las intenciones del albertismo es que el presidente empezó a enviar señales de distensión a Manzur. En principio cuando aceptó ir a Tucumán para el 17 de octubre, una idea que parece haber quedado en el olvido.
En tanto, en Tucumán se sigue hablando sobre el futuro de Manzur. La versión más fuerte sigue siendo que planea ser candidato a vicegobernador de Jaldo; pero el entorno del jefe de gabinete deja trascender que además de esa candidatura no descarta también ir para presidente, aprovechando que Tucumán adelantará sus elecciones. De todos modos, las fuentes creen que asumir una banca en el Senado sería una salida más elegante.
