Cuándo un cuadro de Covid -19 puede provocar long COVID

El 72,5% de los pacientes se quejan de algunos síntomas residuales luego de dos meses de la infección, mientras que el 54% permanece afectado por seis meses.
jueves 25 de agosto de 2022
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El COVID tiene características heterogéneas. Puede ser asintomático, inducir síntomas leves o causar una enfermedad crítica. Con la intención de comprender mejor el escenario, un dúo de investigadores desarrolló un modelo matemático de la respuesta inmunitaria al SARS-CoV-2 y comprobaron que el virus no se elimina por completo del cuerpo y causa una infección persistente.

Es que entre el 10 y el 20% de los pacientes sintomáticos tienen un riesgo elevado de compromiso de múltiples órganos y sistemas y mortalidad. Y cada vez hay más pruebas de que el huésped explica la variabilidad observada en la gravedad de la enfermedad, la tasa de infección y los síntomas de la enfermedad a largo plazo.

La enfermedad de leve a moderada en personas por lo demás sanas puede causar una enfermedad potencialmente mortal y/o una amplia gama de síntomas persistentes. El determinante general de la gravedad de la enfermedad es la edad, principalmente porque la respuesta inmunitaria disminuye en los pacientes que envejecen.

Siguiendo estos pasos, con la intención de comprender mejor el escenario, Tomonari Sumi del Instituto de Investigación de Ciencias Interdisciplinarias de la Universidad de Okayama y el profesor asociado Kouji Harada del Centro de Educación basada en TI (CITE) de la Universidad Tecnológica de Toyohash, desarrollaron un modelo matemático de la respuesta inmunitaria al SARS-CoV-2 y revelaron que los factores de riesgo típicos relacionados con la edad, como solo una disminución del 10 % en la actividad de las células inmunitarias innatas y la inhibición de la señalización del interferón tipo I, disminuyen drásticamente este comportamiento orgánico y contribuyen al aumento de la carga viral.

En ese sentido, este dúo de investigadores informaron, a partir de su investigación, que la cantidad de ciertos subconjuntos de células dendríticas se mantuvo en menos de la mitad de la de los donantes sanos, incluso siete meses después de la infección. Por lo tanto, la respuesta inflamatoria estaba en curso.

El virus no se elimina por completo del cuerpo y causa una infección persistente
El virus no se elimina por completo del cuerpo y causa una infección persistente

Mientras el virus sigue mutando en subsiguientes oleadas de infección, las posibilidades de controlar su difusión sigue mermando. En este escenario, la cantidad de pacientes que transitan COVID prolongado ha aumentado significativamente y ahora se considera un problema social de envergadura. A la par, las causas de este paso aún no se ha aclarado, aunque los científicos han propuesto varias hipótesis diferentes.

Una de ellas es la infección persistente dentro de los huéspedes infectados, en la que el virus permanece dentro del cuerpo durante un período prolongado después del contagio. El dúo de investigadores japoneses acaban de publicar sus hallazgos en la revista especializada Cell. En ese documento buscaron herramientas nuevas para poner luz al hecho de que las infecciones persistentes dentro de los huéspedes infectados realmente ocurren e identificar en dichos casos los factores causales.

 Esta infección persistente es atribuible, en el caso de COVID-19 que es sistémico, a la presencia duradera de suficientes células huésped / EFE/Javier Etxezarreta
A partir del desarrollo del modelo matemático que compusieron para la investigación, comprobaron que el virus no se elimina por completo del cuerpo y causa una infección persistente, incluso en el modelo de referencia que produce una carga viral promedio. Esta infección persistente es atribuible, en el caso de COVID-19 que es sistémico, a la presencia duradera de suficientes células huésped, de modo que los sitios de infección se pueden encontrar fácilmente. Matemáticamente, una cura completa, en la que la carga viral se reduce a cero, se representa mediante un punto de equilibrio inestable, lo que implica que es difícil alcanzarla.

Con esos datos en mano, los profesionales investigaron la influencia de los niveles de inmunidad relacionados con la edad en la gravedad de la enfermedad. Demostraron que los factores que se sabe que son riesgos comunes asociados con el envejecimiento, como la disminución de la actividad de las células generadoras de antígenos y la inhibición de la señalización del interferón por parte de los autoanticuerpos de interferón tipo I, aumentaron significativamente la producción viral dentro del cuerpo, lo que lleva a graves infecciones.

Acerca de las afecciones persistentes al COVID-19 y afecciones posteriores al COVID-19

La vacuna Covid-19 no aumenta el riesgo de parto prematuro



Las afecciones posteriores al COVID-19 son una amplia variedad de problemas de salud nuevos, recurrentes o en curso que las personas pueden experimentar después de haberse infectado por primera vez por el virus que causa el COVID-19. La mayoría de las personas con COVID-19 mejora al cabo de unos días o semanas, así que las afecciones posteriores al COVID-19 aparecen al menos cuatro semanas después de la infección y recién pueden detectarse. Todas las personas que se infectaron pueden tener afecciones posteriores al COVID-19. La mayoría de las personas con afecciones posteriores al COVID-19 presentaron síntomas unos días después de tener una infección por el SARS CoV-2 cuando sabían que tuvieron COVID-19, pero algunas personas con afecciones posteriores al COVID-19 no se dieron cuenta cuando se infectaron.

No existe una prueba para diagnosticar las afecciones posteriores al COVID-19 y las personas pueden tener una amplia variedad de síntomas que pueden deberse a otros problemas de salud. Por tal motivo, es posible que a los proveedores de atención médica les resulte difícil reconocer las afecciones posteriores al COVID-19. Su proveedor de atención médica considera un diagnóstico de afecciones posteriores al COVID-19 con base en su historial previo de infección, que incluye si le diagnosticaron COVID-19 mediante una prueba de detección con resultado positivo o por los síntomas o exposición, así como un examen de salud.