Intensifican la capacitación por la presencia del vector HLB
Ante la aparición de un foco del vector Diaphorina citri, como agente de diseminación de la enfermedad más destructiva de las plantaciones cítricas en el mundo, HLB –Huanglongbing– al Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres (EEAOC), lleva adelante la capacitación gratuita de productores y profesionales. El investigador Gerardo Gastaminza, alertó sobre la gravedad de esta enfermedad al señalar que su aparición en Brasil provocó la eliminación de 50 millones de plantas cítricas, lo que equivale al doble de árboles que hay en toda Argentina.
En Venta a la Ciencia, a cargo de la periodista Daniela Orlandi, el Jefe de la Sección Zoología Agrícola de la EEAOC expresó que la Diaphorina citri ya está en Tucumán, a partir de un foco que se detectó y esto disparó un plan de contingencia desde marzo para evitar su propagación. Esto implica realizar mucho monitoreo y control químico del insecto.
Gastaminza destacó que el insecto solo fue detectado en zonas urbanas y no en quintas cítricas de Tucumán. Este no es un dato menor para el experto, ya que permite a los organismos competentes adoptar todas las medidas preventivas y para ello la Estación Experimental junto al Senasa lleva adelante la capacitación de profesionales y productores. “Para enfrentar a esta enfermedad debemos basarnos en la capacitación, la vigilancia y el monitoreo, tres herramientas fundamentales para la detección precoz del Huanglongbing (HLB) y su insecto vector, Diaphorina citri”, explicó.
Destacó que "desde la EEAOC en conjunto con otros organismos oficiales (Senasa, Secretaría de Agricultura de Tucumán) y el sector privado representado por (Afinoa - Acnoa), desde hace más de una década vienen trabajando en la implementación de diferentes acciones de vigilancia, monitoreo y capacitación en toda el área citrícola de la región".
En lo que va del año, se capacitó a siete escuelas agrotécnicas ubicadas en diferentes ciudades de la provincia (Concepción, Famaillá, Alberdi, Río Chico y Burruyacu), 12 empresas citrícolas y personal monitoreador de Senasa alcanzando un total de 720 personas.
