Hacer yoga baja el colesterol malo en cuestión de semanas
Cuando las personas hablan de colesterol “malo”, se refieren al colesterol LDL (lipoproteína de baja densidad). Este es el tipo de colesterol que se sabe que se forma en las arterias como una placa. Por el contrario, el colesterol “bueno” ayuda a mantener la salud cardiovascular en general y reduce el riesgo de enfermedad cardíaca.
Si el colesterol “malo” de alguien alcanza niveles poco saludables, hay varias maneras de reducirlo. Estas van desde el estilo de vida hasta las medidas farmacológicas.
Entre los numerosos beneficios que aporta el ejercicio físico, se encuentra la reducción de los niveles de colesterol. Esta es una de las causas por las cuales los deportistas son menos propensos a padecer enfermedades cardio y cerebrovasculares.
Ahora, un estudio de la India publicado en la revista Frontiers in Public Health sugiere que una de las maneras más efectivas de ejercicio para reducir el colesterol es el yoga. El estudio encontró que los niveles de colesterol “malo” disminuyeron después de solo un mes.
Los investigadores dijeron que su estudio fue “inspirado por la visita de los indios a Chandigarh, cuando un gran número de personas hizo fila para ganar cupones para realizar yoga con su líder. Esto aumentó el tamaño de la muestra de individuos que los científicos de otros países no pudieron reclutar”.
El número final de participantes fue de 281 personas, incluidas 195 con comorbilidades y 86 sin ellas. Después de un mes, se midieron los niveles de colesterol de todos los participantes.
Los resultados mostraron que los niveles de colesterol LDL disminuyeron en comparación con las lecturas tomadas al comienzo del ensayo.
La investigadora Kausha Sharma agregó: “Nuestros resultados han demostrado que las mujeres son más receptivas a las prácticas de yoga. Sin embargo, nuestro estudio no proporciona un vínculo directo entre el papel protector de las hormonas femeninas y las prácticas yóguicas”.
El rol de la alimentación para tener el colesterol controlado
Además del ejercicio, hay otras formas en que las personas pueden reducir su colesterol. Estas incluyen comer menos alimentos grasos, dejar de fumar, reducir el consumo de alcohol y el aporte de ciertos medicamentos como las estatinas que funcionan reduciendo la cantidad de colesterol producido en el hígado.
Importante es considerar el cuidadoso consumo de sal agregada, y moderar el consumo de productos ultraprocesados con agregado de grasas de origen animal y trans”, advierte Gabriela Rimer, licenciada en Nutrición (M.P. 026) y miembro del Consejo Directivo del Colegio de Nutricionistas de la Provincia de Buenos Aires.
Sustancias como levadura de arroz, curcumina, fitoesteroles, resveratrol ayudarían a disminuir el colesterol LDL. Como también aceite de chía, o de pescado en cápsulas, ya que aportan ácidos omega-3, considerando estas últimas sustancias dentro de los suplementos dietarios.
La experta sugiere que tomar los consejos de la dieta Mediterránea para lograr estos objetivos es una buena opción. El patrón típico de esta alimentación está basado en un elevado consumo de variados alimentos de origen vegetal. Por ejemplo:
- Legumbres (porotos de diversos tipos, lentejas, arvejas secas, garbanzos).
- Frutos secos (nueces, almendras, avellanas, castañas, maní).
- Frutas frescas (eligiéndolas siempre como postre).
- Verduras de variados colores, en lo posible crudas o mínimamente procesadas para maximizar contenidos de fibra, antioxidantes, vitaminas, minerales.
- Cereales, eligiéndolos con su cáscara (integrales); salvado de avena.
- Leche y derivados, en lo posible descremados.
