Ya rige la propina electrónica en bares y restaurantes
Las empresas de pagos digitales aseguran que los clientes dejan montos hasta un 20% más altos que cuando dejaban la gratificación en efectivo en bares y restaurantes
Instrumentada a través de un decreto, ya entró en vigencia la obligación para determinados comercios de ofrecer al consumidor la posibilidad de abonar la propina a través de medios de pago electrónicos, como tarjetas o pagos QR, añadiéndola al resto de la cuenta. La propina sigue siendo, como hasta ahora voluntaria. Discrecionalmente, el cliente puede decidir cuánto dejarle a quien lo atendió, ya sea un mozo en un establecimiento gastronómico, un botones en un hotel o el motoquero de un delivery.
De esa forma, tarjetas, adquirentes y agregadores de pagos comenzaron a aplicar las medidas necesarias para que el sistema comience a estar disponible, ya que transcurrieron los 90 días de plazo que el decreto 731 dispuso para su implementación. Y todo el mercado suma esta nueva herramienta como un escalaón más en la ola de digitalización de los pagos y la reducción del uso de efectivo.
En una primera etapa, será obligatorio ofrecerle al cliente la posibilidad de dejar la propina a través de un pago digital en locales gastronómicos, hoteles, aplicaciones de delivery y estaciones de servicios. En todos esos caso, a la hora de pagar la propina el cliente debe contar con una forma electrónica de hacerlo. El decreto dispone que la medida se extenderá en el futuro a cualquier actividad “en cuyas relaciones de consumo sea costumbre otorgar o recibir propinas”.
Desde el punto de vista del consumidor, la medida le agrega una cuota de comodidad y rapidez al poder pagar con medios electrónicos y, de esa forma, incluir la propina en el total de la cuenta a pagar, realizando un único pago por el total. Le evita además cualquier complicación por carecer del efectivo suficiente en el momento de abonar. Cabe destacar que el decreto no trae ninguna obligación adicional para el consumidor, quien seguirá decidiendo cuánta propina dejar y cómo pagarla en forma absolutamente voluntaria.
El decreto también especificó algunas cuestiones vinculadas a la relación laboral de los trabajadores con los comercios. Deja en claro que la propina no forma parte del salario y que el hecho de que el comercio sea un intermediario en el pago, ya que la gratificación se acredita en su cuenta, no le genera ninguna obligación. También se estableció que la propina no esté sujeta a ninguna retención impositiva: de hecho, fue expresamente excluida del impuesto al cheque.
Desde la Cámara Argentina Fintech celebraron la medida, a la que consideraron “un paso significativo hacia la digitalización y simplificación de los pagos en nuestro país”. La entidad señaló que “el 100% de la población adulta en Argentina es titular de, al menos, una cuenta de pago y/o bancaria, mientras que los pagos digitales se han quintuplicado en proporción a las extracciones en cajeros automáticos en los últimos cinco años, reflejando la gran adopción que tuvieron los pagos con transferencia y otros mecanismos electrónicos para operaciones cotidianas”.