Ante una semana que promete máximas que superarán los 35 °C, el meteorólogo Jorge Noriega pronosticó que podría llegar la primera ola de calor a Tucumán y que difícilmente habrá lluvias en la provincia.

Según explicó nuestro especialista, para que se considere una ola de calor las temperaturas mínimas tienen que ser de 22°C o más, mientras que las máximas deben ser de 35°C o superiores y que estas deben durar al menos 3 días, algo que claramente se empezará a sentir desde mañana.

Este lunes dará inicio una seguidilla de días con temperaturas cercanas a los 36 grados. La primera jornada de la semana tendría cielo parcialmente nublado con marcas de entre 21 grados de mínimo y 32 de máximo.

Para el martes, se anticipa también cielo parcialmente nublado durante todo el día y noche, acompañado de temperaturas que se prevén entre 24 y 35 grados.

El miércoles, en tanto, se prevé con cielo algo nublado, una temperatura mínima de 22 grados y una máxima de 36.

La jornada más calurosa de la semana sería el jueves, que se espera con cielo algo nublado en la madrugada y mañana, pasando a parcialmente nublado en la tarde y noche, con temperaturas de entre 26 y 38 grados.

El SMN prevé que este viernes las temperaturas sean de entre 27 y 36 grados.

Recomendaciones del SMN ante temperaturas extremas

Las recomendaciones para este tipo de eventos son indicadas por el Ministerio de Salud.

  • Aumenter el consumo de agua sin esperar a tener sed para mantener una hidratación adecuada.
  • No exponerse al sol en exceso, ni en horas centrales del día (entre las 10 y las 16 horas).
  • Prestar atención a los bebés, niños y niñas ya las personas mayores.
  • Evite las bebidas con cafeína, con alcohol o muy azucaradas.
  • Evite comidas muy abundantes.
  • Ingerir verduras y frutas.
  • Reducir la actividad física.
  • Usar ropa ligera, holgada y de colores claros; sombrero, anteojos oscuros.
  • Permanecer en espacios ventilados o acondicionados.
  • Recordar que no existe un tratamiento farmacológico contra el golpe de calor y sólo los métodos clásicos, citados arriba, pueden prevenirlo y contrarrestarlo.