Osvaldo Jaldo inauguró el primer centro de recuperación para mujeres con adicciones en Tucumán
Con el nombre de Santa Josefina Bakhita, la propiedad incautada del narcomenudeo fue cedida al Arzobispado de Tucumán.
El gobernador Osvaldo Jaldo inauguró esta mañana la primera casa de acompañamiento integral en adicciones para mujeres, denominada “Santa Josefina Bakhita”, ubicada en avenida Gobernador del Campo 364, en San Miguel de Tucumán. Jaldo destacó la transformación del lugar, que anteriormente era un espacio asociado al narcotráfico, en un hogar para la recuperación y reinserción social de mujeres.
Durante el acto, Jaldo subrayó la importancia de la colaboración entre las autoridades y la comunidad para combatir las adicciones, un problema que afecta a toda la sociedad.
Señaló que este centro es solo el comienzo de un esfuerzo más amplio para crear espacios de apoyo para quienes enfrentan este flagelo. La casa, recuperada tras una investigación de la Unidad Fiscal de Narcomenudeo (UFINAR), fue entregada al Arzobispado para su administración junto al Hogar de Cristo Divino Maestro.
El gobernador resaltó que el edificio, que antes se encontraba en estado de abandono, ha sido completamente refaccionado para ofrecer un espacio seguro y digno, con capacidad para albergar a 40 mujeres en proceso de recuperación. Este proyecto cuenta con el apoyo del Ministerio de Salud, que ha contribuido con mobiliario y personal especializado para garantizar la atención médica necesaria.
Además, Jaldo anunció que se realizarán mejoras adicionales en las instalaciones, como la incorporación de aire acondicionado y la habilitación de áreas para los hijos de las mujeres que asisten al centro. El objetivo es garantizar que las madres puedan continuar su tratamiento sin separarse de sus familias, brindándoles un entorno de apoyo integral.