Todavía son frescos los recuerdos de la sequía de 2021 a 2023 en la memoria de los productores misioneros: grandes y graves incendios, así como pérdidas millonarias en economías regionales como yerba mate, tabaco, mandioca, té y forestación dejaron secuelas que en algunos casos todavía no se han recuperado del todo.

Ahora se avecina una situación parecida, en los pronósticos del Servicio Meteorológico Nacional, lo cual dispara una alerta entre los productores y las industrias que dependen del clima para su actividad.

Es que se proyectan lluvias hasta un 50% por debajo de lo normal para septiembre y octubre, con grandes probabilidades de extenderse otros meses; al mismo tiempo que se calculan temperaturas que serán entre 45% y 50% por arriba de lo normal para esas épocas. Calor extremo y escasas lluvias: un combo letal.

El fenómeno que se avecina no solo fue advertido por el SMN, sino que ya captó la atención de todo el mundo. Un reciente informe divulgado por la Organización Meteorológica Mundial (OMM) presenta proyecciones climáticas para la región argentina entre 2024 y 2025; y anticipa que la sequía que afectó severamente al país hasta el año pasado podría volver a golpear al agro en los próximos meses.

La entidad sostuvo que el fenómeno conocido como “El Niño” se terminó a mediados de año pero crecen las probabilidades de que, hacia fines de 2024 se repita “La Niña”, que impactó a Sudamérica desde 2020 hasta 2023.

Sobre esa sequía, Juan Rivera, doctor en Ciencias de la Atmósfera e investigador del CONICET, explicó que “las mayores temperaturas contribuyen a un mayor impacto de las sequías. Esto lo analizamos considerando diversos episodios de olas de calor en la temporada 2022/23, los cuales contribuyeron a reducir drásticamente la humedad del suelo, generando sequías de rápido desarrollo”.

La preocupación también alcanza a los trabajadores de las Áreas Naturales Protegidas de Misiones, que se expresan a través de redes sociales y recientemente publicaron: “Tenemos una alta probabilidad de meses con sequía y altas temperaturas, y no se ha bajado ninguna línea al respecto, ni equipamiento o indumentaria adecuada. Es necesario que los vehículos oficiales estén disponibles para el inmediato periodo de incendios, es necesario presupuesto para reparar equipo de combate de fuego, es necesario indumentaria adecuada para el combate de incendios”.

“La Niña” regresa

La meteoróloga Cindy Fernández explicó: “Si las condiciones se cumplen rápidamente, ‘La Niña’ podría darse a finales de año. En Argentina, los efectos podrían incluir escasas precipitaciones en el Litoral y el norte de Buenos Aires, así como altas temperaturas y olas de calor durante el verano”.

Por su parte, José Luis Stella, del Centro Regional del Clima para el sur de América del Sur, señaló: “Venimos de atravesar tres años con un evento de La Niña prolongado que trajo sequías extremas e históricas, con gran impacto, y luego una transición rápida al fenómeno de El Niño. Ahora, nuevamente, estamos en una transición hacia La Niña. No solamente estamos en un clima extremo, sino en una variabilidad también bastante extrema y rápida”.

Una nueva seca implicaría una posible merma en la cosecha y la consecuente liquidación de divisas del agro del año próximo, con lo cual, tendrá implicancias fuertes en la economía nacional, la recaudación y la distribución de recursos a las provincias.

Situación similar le ocurrió al exministro de Economía de la Nación, Sergio Massa, que en medio de la campaña buscando la elección como presidente, se pasó explicando que la sequía no le permitió reunir los dólares para pagar la deuda, dejar de emitir pesos y bajar la inflación. El final fue el que ya conocemos.