La causa de amenaza contra la intendenta Chahla fue archivada: el acusado busca limpiar su nombre
Tras una investigación que incluyó allanamientos y peritajes, la causa fue archivada recientemente por falta de pruebas
En noviembre del año pasado, en un contexto de despidos en la Municipalidad de San Miguel de Tucumán bajo la intendencia de Rossana Chahla, surgieron denuncias que señalaban amenazas de muerte contra la intendenta. El 6 de diciembre, Chahla reveló públicamente que había sido víctima de estas amenazas, lo que dio inicio a una serie de medidas legales para investigar los hechos. Los abogados de la Municipalidad presentaron pruebas y se realizaron allanamientos y peritajes.
Julio Rocha, quien trabajaba en la municipalidad, fue señalado como el posible autor y fue detenido temporalmente mientras se le incautaba su teléfono móvil como parte de la investigación.
Rocha asegura que todo fue un malentendido y que desde el principio estuvo dispuesto a colaborar con la justicia. “El 4 de diciembre fui a trabajar, y dos días después me entero de una foto mía, de la pandemia, en la que aparezco con un arma de juguete, pero que había circulado junto a amenazas. Al día siguiente, fui a trabajar y me prohibieron la entrada por orden de superiores. Poco después, sin ninguna explicación, me dijeron que estaba despedido. Nunca hice nada malo ni estuve en ningún grupo de WhatsApp ni nada parecido”, relató.
El 7 de diciembre, la policía allanó la casa de Rocha sin encontrar evidencia que lo relacionara directamente con las amenazas.
Tras meses de investigación y sin pruebas que demostraran su culpabilidad, la causa fue archivada. “Hace un mes, la justicia me entregó el archivo de la causa, y el 8 de noviembre recuperé mi celular. Quiero limpiar mi imagen y que la intendenta sepa la verdad; la llenaron de mentiras y me difamaron públicamente”, expresó Rocha.
Además, Rocha reveló que demandó a Matías Martínez, quien fue la persona que, según él, dio falso testimonio y ayudó a difundir la foto que lo involucró. “Esta persona incluso me amenazó con plantarme un arma de fuego. La justicia me desvinculó de la denuncia, y yo no tengo ninguna orden de restricción hacia la intendenta ni la municipalidad”, afirmó.
Con el archivo de la causa y el regreso de su teléfono, Julio Rocha espera poder recuperar su reputación y hacer que su versión de los hechos sea escuchada.