Alan Matturro, joven jugador uruguayo que juega en el Genoa de la Serie A italiana, ha firmado recientemente otro contrato aparte del de su club, que tiene más que ver con lo virtual. Y es que a Matturro no solo le gusta jugar al fútbol en el mundo real, sino que también es un apasionado del videojuego EA Sports FC 24 (sucesor de la saga FIFA); tanto, que esta afición parece haber provocado ciertos conflictos con su novia.

Eso sí, ambos están dispuestos a poner de su parte para llegar a un entendimiento, y prueba de ello es que han firmado un curioso contrato con una serie de cláusulas que cada uno de ellos se compromete a cumplir. Por ejemplo, él promete no "gritar como un loco" cuando juega y pausar la sesión para poner la mesa cuando sea la hora de comer, mientras que ella deberá amenizar sus partidas dándole mate y tiene prohibido morderle durante los momentos de juego. Su novia, Anto Ciavaglia, ha compartido en TikTok el vídeo en el que se ve a ambos firmar el peculiar contrato.

Cómo lo resolvieron

@antociavaglia Ahora si ðŸ¤ÂðŸÂ» @ALAN MATTURRO ❤ï¸Â #fifa24 #foryou #parati ♬ sonido original Anto Ciavaglia

El contrato indica que su motivo es "debido a malentendidos ocasionados debido a la Play 5", ya que Matturro juega a la versión de EA Sports FC 24 para PlayStation 5, y establece las siguientes cláusulas:

Alan Matturro se compromete a:

  • Jugar a la Play sin gritar como un loco, mucho menos agredir en voz alta a sus compañeros, que se escucha desde la calle
  • Ser un poco más atento a los alrededores cuando se le habla o pregunta algo (por seguridad de él mismo), puede explotar todo que él sigue jugando
  • Levantarse a poner la mesa cuando se le pide (para no comer la comida fría)
  • Evitar saltar y gritar como un mono cuando mete un gol
  • Mientras estoy jugando a la Play tiene prohibido morderme
  • Me tiene que dejar tranquilito jugar dos días antes del partido sin echarlo en cara después
  • Cebarme mates mientras juego
  • Apoyarme porque cada vez que pierdo o me enojo con mis amigos me la agarro con ella