No fue el terremoto de Chile, aunque éste se sintió en varias partes del país. Esta vez fue el sofocante calor que acompaña a la región cada navidad y año a año se siente con más intensidad. Los habitantes de la localidad humbertina terminaban el almuerzo en familia mientras el termómetro superaba los 40 grados y el pavimento se recalentaba, hasta que un fuerte ruido hizo saltar a varios de la silla, que para su sorpresa venía de la plaza central donde la calle se había partido en dos, levantando el cordón y volviendo intransitable al sector. 

Fenómenos como estos suelen ocurrir con frecuencia, afectando las calles y rutas de distintas maneras. Lo extraño es el comportamiento del clima, que según varios organismos internacionales, este 2016 la temperatura alcanzó niveles récord y continuaría por esa vía, provocando el derretimiento del hielo polar y desatando fuertes tormentas.